Por The Freedom Post
La batalla por el poderío mundial entre Washington y Beijing también se libra en el espacio exterior.
El Partido Comunista Chino (PCCh) tiene un nuevo blanco. El empresario de la tecnología Elon Musk está siendo observado por uno de los proyectos de su empresa de exploración espacial SpaceX.
Los medios de comunicación del PCCh han afirmado continua y públicamente que el desarrollo de Internet satelital por parte de China esta en miras de la defensa nacional.
La dictadura comunista que encabeza Xi Jinping apunta al programa Starlink en América del norte. Lo realiza como un reto a los intereses estratégicos centrales de Washington.
Starlink es un proyecto de constelación de Internet por satélite. SpaceX presentó el proyecto por primera vez en enero de 2015. El objetivo es proporcionar acceso a Internet de alta velocidad en todo el mundo a través de satélites en órbita cercana a la Tierra.
La compañía planea lanzar aproximadamente 12.000 satélite como parte de Starlink entre 2019 y 2024. De esa forma, la empresa construirá una red satelital gigante de tres capas que eventualmente unirá todos los satélites en una «constelación» gigante.
Los aparatos proporcionarán Internet de alta velocidad, 24/7 y a bajo costo con una cobertura global.
Unos 1.000 satélites ya están en órbita y en funcionamiento. Starlink planea proporcionar servicios que pueden cubrir casi toda la Tierra para fines de 2021. La empresa podría expandirse a 42,000 satélites en el futuro.
Satélites militares
Y el proyecto Starlink no está desligada de los Estados Unidos. Puede tener motivos militares.
En noviembre del año pasado, el Comando Indo-Pacífico reveló las intenciones de desarrollar el un programa Starlink para la Fuerza Espacial de EEUU.
Voceros militares argumentan que el gobierno estaba trabajando con SpaceX para desplegar una cadena de red de satélites espaciales masiva y satélites militares similar al programa Starlink. Es un requerimiento militar de gran importancia estratégica.
El comandante de la Fuerza Aérea de EEUU en el teatro del Pacífico, general Kenneth Wilsbach, corroboró el interés. Dijo al respecto que los satélites de vigilancia de órbita baja son muy necesitados para ayudar a rastrear objetivos en tierra, mar y aire.
«Sí, estoy absolutamente a favor de más inteligencia, vigilancia y reconocimiento basados en el espacio», dijo Wilsbach, comandante de las Fuerzas Aéreas del Pacífico en el Comando Indo-Pacífico.
El Starlink chino
Elon Musk está en la mira de los chinos porque están copiando su negocio. Al amparo del PCCh, el gigante asiático lanzó GalaxySpace.
Esa empresa, con lazos al fabricante de celulares Xiaomi, se dedicará a la «producción masiva de pequeños satélites de bajo costo y alto rendimiento».
Junto a esto planean construir «la constelación de satélites de órbita baja de banda ancha líder en el mundo y una cobertura global con la red de comunicación 5G «.
Ya cuenta con un satélite en órbita . Y ahora, GalaxySpace se centrará en la construcción de una súper fábrica. Allí se producirán entre 300 y 500 satélites por año
Beijing por su pate espera que «acorte la brecha entre la capacidad de producción de satélites de próxima generación de China y la de Estados Unidos en dos años.