Caracas. – El nuevo presidente electo de Bolivia, Rodrigo Paz, dejó fuera de la lista de invitados a su toma de posesión al jefe del «Cartel de los Soles», Nicolás Maduro, mientras que al mismo tiempo estrechó alianzas con María Corina Machado, a quien si extendió una invitación para el acto previsto para el próximo 8 de noviembre.
En una entrevista con CNN, el nuevo mandatario boliviano marcó distancia con los regímenes del llamado socialismo del siglo XXI, dejando ver un cambio radical en la política exterior del país tras dos décadas de vínculos estrechos con países alineados con la izquierda.
En este sentido, Paz sostuvo que no invitará a su toma de posesión al narcotirano de Venezuela, Nicolás Maduro, a Daniel Ortega, dictador de Nicaragua, ni a Miguel Díaz-Canel, dictador de Cuba, mandatarios afines al expresidente Evo Morales y al Movimiento Al Socialismo, partido saliente del Gobierno.
“Nosotros somos un país democrático. Si bien hay relaciones diplomáticas que deben respetarse, nuestra condición de relacionamiento es sobre la base de la democracia”, afirmó el nuevo mandatario.
Igualmente, se refirió tanto al régimen chavista, como a los de Cuba y Nicaragua como «no democráticos». “Claramente, no democráticos, claramente”, respondió con énfasis, antes de añadir: “Yo no quisiera que mi país fuera ninguno de esos tres”.
A la par, se reveló que sostuvo una llamada telefónica con Machado, quien tomó la iniciativa para felicitarlo por su triunfo en las urnas. En ello, Paz manifestó su voluntad de unirse a la «lucha» para «recuperar» la democracia en Venezuela, además de invitarla a su investidura el próximo 8 de noviembre.
El equipo de prensa de Paz difundió el video del diálogo que sostuvo con la dirigente venezolana, a la que reiteró sus felicitaciones por el Nobel que le fue conferido este año y que calificó como un «golazo de media cancha» que ha «dignificado» a «todos los sudamericanos y a la democracia mundial».