Representantes de varias ONG se concentraron frente a la sede del Sebin, en Plaza Venezuela, para reclamar la excarcelación de Javier Tarazona, Rafael Tarazona y Omar García
Caracas. – Una protesta, a cargo de diferentes organizaciones dedicadas a la defensa de los Derechos Humanos (DDHH), se llevó a cabo este sábado, 03 de julio, frente a la sede del Sebin en Plaza Venezuela (Caracas), para exigir la liberación de Javier Tarazona y otros dos activistas detenidos por la narcotiranía este viernes.
El director de Fundaredes fue detenido junto a su hermano Rafael Tarazona, su compañero Omar García, y el dirigente del movimiento MayDay Confavidf, Yhonny Romero, ayer viernes cuando acudía a la sede del Ministerio Público en Coro, a realizar una denuncia por hostigamiento.
Precisamente un grupo de hombres, incluyendo funcionarios del Sebin, Polifalcón y otros sujetos de civil pero igualmente armados, quienes tenían días siguiéndolos y acosándolos, los detuvieron.Solamente fue liberado Romero, a quien dejaron salir el mismo viernes en la noche. Pero a los hermanos Tarazona y a García aparentemente los trasladaron al cuartel central del Sebin en Plaza Venezuela, algo que no ha sido comprobado todavía.
También desconocen en qué estado se encuentran.Entre las organizaciones que acudieron para hacer sentir su voz de reclamo ante esta situación figuraron Espacio Público, Foro Penal, Acceso a la Justicia, Provea y Amnistía Internacional, entre otras.
«Parece que esta detención arbitraria constituye la continuación del patrón de persecución contra la sociedad civil independiente que ha venido movilizándose para denunciar las diferentes situaciones violatorias de derechos humanos. Defender los derechos humanos no es un delito, y este tipo de acciones de amedrentamientos no van a silenciar el trabajo de las organizaciones», dijo desde Plaza Venezuela, el director de Provea, Rafael Uzcátegui.
Por su parte, la directora de Amnistía Internacional para Latinoamérica, Érika Guevara-Rosas, se pronunció con respecto a la situación con el siguiente mensaje por Twitter: «Otro ataque a personas defensoras de DDHH en Venezuela, que se suma a los 97 denunciados por la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas».
Mientras, Marino Alvarado, ex director de Provea, denunció que «estamos ante una desaparición forzada», además de criticar que en el organismo represivo se negaron a darles información acerca del paradero de los tres activistas.