Caracas. – Un asesor del equipo de campaña de Manuel Rosales, el politólogo Ricardo Sucre Heredia, causó revuelo en las redes sociales tras afirmar que «muchos nos doblamos por la paz, autoritaria, pero paz».
Así lo afirmó el asesor de Rosales en un debate que protagonizó por la red social «X», con el comunicador social Santiago Romero, con quien conversó sobre las complejidades y las concesiones que algunos están dispuestos a hacer en búsqueda de un entorno pacífico, aun cuando este esté teñido por la autoridad y el control.
En el marco de la discusión, Sucre le dijo al periodista: «cuando vayas a comer tus ricas empanadas en Chacao, recuerda que muchos nos doblamos por la paz, autoritaria, pero paz. Tú querías guerra».
Romero no tuvo más remedio que resaltar la gravedad de aceptar un concepto como la «paz autoritaria» por parte de un asesor político, tal como lo es Sucre El comunicador advirtió las implicaciones profundas que esto podría tener, sobre la percepción de la democracia y la libertad en el país.
La respuesta de Sucre desató una ola de reacciones de analistas, periodistas y figuras conectadas con el entorno político del país. Muchas de las reacciones resaltaron que se trata de la opinión de alguien que asesora a una figura, que pretende competir en las elecciones presidenciales, como es el caso de Rosales.
Por ejemplo, el abogado y defensor de derechos humanos Alí Daniels sostuvo que el termino «paz autoritaria no es paz, es conflicto silente, es represión sin ruido, no es paz».
También, Pedro Urruchurtu, coordinador internacional de Vente Venezuela, explicó que «paz autoritaria representa la resignación y la adaptación a una existencia limitada y controlada», situación que rechaza categóricamente, incluso frente a las consecuencias personales extremas.
Por su parte, Elisa Trotta, secretaria general del Foro Argentino por la Defensa de la Democracia, aseguró que «no existe la ‘paz autoritaria’. Sugerir eso es burlarse de los presos políticos y sus familias. Es pisar la memoria de las víctimas. Es silenciar los gritos del torturado. La paz solo existe en democracia».