Caracas. – Gabriel Alexander García Peñaloza (43), alias «Chande Bemba», uno de los asesinos de los hermanos Faddoul, cuádruple homicidio cometido en 2006, fue detenido casi 20 años después por la GNB en el estado Aragua.
Peñaloza, quien tenía 23 años cuando cometió los asesinatos y se dedicaba en ese entonces al robo de autos, es uno de los autores materiales del secuestro y posterior homicidio de los hermanitos Faddoul: Jason (17 años), Kevin (13 años) y John Bryan Faddoul (12 años), junto a su chofer Miguel Rivas, fue apresado por efectivos del Grupo de Acciones Especiales (GAES) N.º 42 de Aragua, perteneciente al Comando Nacional Antiextorsión y Secuestro (CONAS).
Fuentes policiales señalaron, que la captura es resultado de un exhaustivo trabajo de inteligencia y campo realizado por el GAES, poniendo fin a 18 años de fuga para el implicado. Según el Sistema Integrado de Información Policial (SIPOL), García tenía tres órdenes de captura vigentes.
La vinculada al caso Faddoul es la principal, pero también lo solicitaban por robo de vehículo desde marzo y abril de 2002, en las delegaciones de El Tigre y Caricuao, respectivamente.
El mencionado secuestro ocurrió el 23 de febrero de 2006 en Caracas. Los tres hermanos, de 17, 13 y 12 años, y su chófer, Miguel Rivas, fueron interceptados cuando se dirigían al colegio Nuestra Señora del Valle.
Los delincuentes montaron una falsa alcabala en la zona de Vista Alegre, vestían uniformes de la antigua Policía Metropolitana (PM), lo que posteriormente reveló la implicación de funcionarios activos en la red criminal.
Los captores contactaron a la familia Faddoul para exigir un rescate inicial de USD$ 4.5 millones. Pese a la angustiante negociación y a los intentos de la familia por reunir el dinero, el intercambio fue abortado cuando los secuestradores detectaron presencia policial.
El desenlace fue fatal. Tras 41 días de cautiverio, los cuerpos de las cuatro víctimas fueron hallados el 4 de abril de 2006 en el sector El Lechozal, de San Antonio de Yare, en los Valles del Tuy. Presentaban signos de tortura e impactos de escopeta en la cabeza.
