Caracas. – Alberto Carlos Mejía Hernández (18), un sicario venezolano perteneciente al «Tren de Aragua», quien se encontraba prófugo de la justicia, fue capturado este pasado fin de semana en Colombia, durante un operativo realizado en Barrancabermeja, un estado cerca de Barranquilla, al norte del Departamento de Santander.
Mejía era buscado por la justicia chilena, en 196 países, después de que el 10 de julio fuera liberado, inexplicablemente, de la cárcel Santiago l, apenas un día después de que ingresó a cumplir prisión preventiva, tras ser imputado como el sicario que asesinó al prestamista informal José Felipe Reyes Ossa en junio de este año.
Tras permanecer prófugo más de un mes, el individuo fue detenido la noche del viernes en Barrancabermeja. Durante casi un día estuvieron corroborando su identidad y las autoridades explicaron que su captura «se logró gracias a un exhaustivo trabajo de inteligencia e investigación”.
Esto incluyó “intercambio de información entre entidades colombianas, el OS9 de Carabineros, sumado a la coordinación con PDI e Interpol”. Asimismo, añaden que «la Policía Nacional de Colombia, con su unidad Interpol, una unidad de búsqueda de prófugos, logra dar con su paradero y detenerlo en la vía pública, una detención limpia, una detención eficaz».
El sujeto, quien cruzó rápidamente la frontera desde Chile en dirección a Colombia, se tiño el cabello de rubio para cambiar su apariencia y despistar a los cuerpos policiales.
No obstante, lo que terminó delatándolo fue un tatuaje del rostro de Zeus en su mano derecha, el mismo que figuraba en los registros de la PDI chilena. Esa coincidencia permitió a los investigadores confirmar su identidad.
Ya fue conducido a Bogotá, y se espera que inicien los trámites para extraditarlo a Chile, donde será juzgado por el citado homicidio.
