Caracas. – Una lujosa fiesta, celebrada el pasado 04 de febrero, en la cima del Tepuy Kusari, en el Parque Nacional Canaima, a cargo de un empresario «enchufado» al chavismo, fue objeto de numerosas críticas en diversos medios y plataformas digitales.
Oliveros, quien en realidad era un decorador de interiores, fue nombrado por Maduro como miembro del llamado Consejo Nacional de Economía, y también como promotor del proyecto «motor turístico».
Gracias a ese cargo, y a su conchupancia con Marleny Cabello, esposa de Diosdado Cabello, pudo obtener permisos para hacer negocios en Canaima.
Fue así como decidió celebrar su último cumpleaños, usando como escenario un área protegida por las leyes, y destinada únicamente al turismo y conservación del medio ambiente.
Entre los asistentes destacó la presencia de Osmel Souza, el ex zar de la mises venezolanas, quien difundió a través de sus redes sociales, imágenes de la lujosa fiesta.
Diversos grupos ecológicos, como SOS Orinoco, denunciaron la actividad que, por el despliegue requerido, en cuanto a logística e instalaciones, atentó contra el ecosistema del Kusari, parte un parque nacional designado en 1994 por la Unesco como Patrimonio Mundial Natural.
Los invitados debían asistir en smoking. Llegaron al aeropuerto de Canaima, desde donde fueron transportados en nueve lujosos helicópteros hasta el Tepuy.
El lujo, derroche y la violación de leyes que protegen al medio ambiente, fueron duramente criticados en redes sociales. Un gran porcentaje de los comentarios de indignación recayeron sobre la figura de Souza, a quien ya se la ha vinculado en numerosas ocasiones con personajes del chavismo. También fue destacado el nombre de Titina Penzini, prima de Leopoldo López, cuyo apellido fue tendencia, pero debido a los malos comentarios en su contra, en la red Twitter.