Irán inició la noche del sábado un ataque contra Israel, lanzando más de 300 drones y misiles de diversos tipos, pero Israel dice haber interceptado la inmensa mayoría de los objetivos, alrededor del 99%.
Según una declaración de Daniel Hagari, portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), la «amenaza iraní» tropezó con la «superioridad aérea y tecnológica del Ejército» del país hebreo.
De más de 120 misiles balísticos, solo unos pocos cruzaron a territorio israelí. Estos cayeron en la base aérea de Nevatim, situada en el distrito Sur del país, causando daños menores a la infraestructura.
Cabe destacar que esto fue así a pesar de que también se registraron lanzamientos por parte de grupos que Occidente considera ‘proxies’ de Teherán.
Esto se logró, según Hagari, gracias a que Israel ha estado «operando en estrecha coordinación con sus socios, encabezados por el Mando Central estadounidense, el Reino Unido, Francia y otros países».
«Esta asociación siempre ha sido sólida, pero anoche fue excepcionalmente evidente», declaró, y detalla que las fuerzas de Francia «contribuyeron a patrullar el espacio aéreo» el sábado.
Por su parte, Reuters informó, con referencia a fuentes de inteligencia occidentales, que los aviones israelíes y estadounidenses derribaron decenas de drones iraníes sobre el espacio aéreo sirio.
Al mismo tiempo, la agencia reportó, citando a dos fuentes de seguridad regionales, que las fuerzas aéreas jordanas interceptaron y derribaron decenas de drones iraníes que violaron su espacio aéreo y se dirigían a Israel. La cadena iraní de noticias Press TV, a su vez, indicó que al menos diez países ayudaron a Israel a contrarrestar la ofensiva.