Caracas. – El jefe de la Narcotiranía venezolana, Nicolás Maduro, aseveró este pasado lunes que su régimen no cederá ante las presiones para liberar a los menores de edad secuestrados tras las protestas postelectorales.
En la reciente transmisión de su programa, en la noche de este pasado lunes, el narcotirano justificó los raptos de estos jóvenes al asegurar que, supuestamente, habría evidencias sobre los actos vandálicos cometidos, además de presuntamente haber sido contratados para realizar tales hechos.
Actualmente se lleva a cabo una campaña no oficializada, dentro y fuera de Venezuela, por parte de los familiares de estos menores secuestrados, de distintas ONG y por actores políticos internacionales, exigiendo la liberación inmediata de todos.
Las recientes peticiones y ruegos, por parte de las madres cuyos hijos están encarcelados en el retén de Tocorón (Aragua), son una muestra de ello.
Aunque las pruebas demuestran que fueron secuestrados por motivos políticos —oponerse al robo de las elecciones por parte de Maduro—, el líder del narcorégimen insistió en sus declaraciones, que no pueden ser calificados como presos políticos.
En un tono irónico y burlesco, hizo referencia al clamor de las madres de estos jóvenes apresados, señalando que estarían tras las rejas por razones avaladas por la justicia chavista.
«Ellos quieren sensibilizar a la sociedad venezolana. Hay unos muchachos jovencitos, y Maduro los tiene presos. Ni presos políticos, ni Maduro, es la justicia. Están convictos, confeso, y están los videos de TikTok, Instagram, que ellos mismos sacaron cuando amenazaron, cuando balearon, cuando quemaron”, dijo.
Asimismo, acusó a sectores en el extranjero de financiar una “campaña de manipulación” para lavar la imagen de la oposición venezolana: “Están metiendo billetes aquí en el exterior para tratar de lavarle la cara al fascismo de María Fascista Machado y de Edmundo González Urrutia”.
Finalmente, el narcotirano afirmó que su régimen no cederá ante la presión de liberar a estos jóvenes, asegurando que habrá “justicia severa” para garantizar la paz en el país.