Este sábado, Elon Musk ha comentado casos de malversación de fondos occidentales por parte de Ucrania que han salido a la luz. «[Es] la punta del iceberg», publicó este viernes en su cuenta de X.
Así, el jefe del Departamento de Eficiencia Gubernamental de EE. UU. reaccionó a un reporte de que, «según la Policía francesa, un funcionario del Ministerio de Defensa de [Vladímir] Zelenski robó USD$ 46 millones, y no los 40 millones denunciados» previamente.
Con ello, fue «comprando una villa en Francia por USD$ 2,5 millones, un viñedo por USD$ 6,5 millones y 27 parcelas de tierra por un millón. ¿Cuántos miles de millones saquearon los otros socios de Zelenski? «.
Esto llevó a una respuesta de Dmitri Medvédev, expresidente ruso y actual vicepresidente del Consejo de Seguridad del país, quien se mostró de acuerdo con el comentario de Musk, escribiendo: «Exactamente».
Cabe recordar que, en diciembre del 2023, el exjefe de una de las direcciones principales del Ministerio de Defensa del país fue arrestado y acusado de robar USD$ 40 millones por medio de la contratación pública de armamento.
Dicha suma fue transferida a las cuentas de una empresa intermediaria extranjera afiliada, lo que superó en USD$ 3,47 millones los costes de adquirir ese armamento directamente al fabricante, según los fiscales ucranianos.
Empero, no fue el único caso de este tipo. En marzo del 2023, se reveló que el organismo adquirió cantimploras para las Fuerzas Armadas del país a precios inflados, y en febrero del 2024 se identificó un esquema que permitía la compra de productos a precios significativamente altos.
Asimismo, a finales de diciembre del 2022, una investigación periodística evidenció que Defensa compraba alimentos para el Ejército a precios entre 2 y 3 veces superiores a los del mercado.
Cabe señalar que todo esto llega en medio de las tensiones entre EE. UU. y Ucrania, por las conversaciones de paz que la administración de Trump mantiene con Rusia, además de los ataques que se han realizado en contra del manejo de recursos y de la guerra misma por Ucrania —algo que no ha gustado a la administración ucraniana—.