Caracas. – María Gabriela Chávez fue noticia y tendencia en las redes sociales, este miércoles, 30 de noviembre, por acusar a Rafael Ramírez, ex presidente de PDVSA durante el mandato de su padre, de ladrón.
La polémica inició en Twitter, cuando la hija del fallecido tirano criticó a la animación que difundió Rafael Lacava, con personajes que personificaban a Maduro, al mismo Lacava, y a Chávez como si fueran súper héroes.
Su respuesta en rechazo al video fue felicitada por Ramírez, quien le envió un mensaje de solidaridad y ofreciéndole apoyo para desenmascarar a los traidores dentro del PSUV. Sin embargo, María Gabriela lo calificó de delincuente, asegurándole que no necesita de su apoyo.
«No quiero ni necesito el apoyo de un delincuente como usted. De mi opinión como hija NO se guinde para sus proyectos personales. Defender la memoria de Chávez, USTED? Jajaja por favor!!!», fue su respuesta. Rafael Ramírez eliminó el tuit que le había enviado.
Sin embargo, la contesta generó controversia en la red social, por los más de 1300 mensajes que le enviaron los internautas, criticándole también, lo que consideran es una posición hipócrita de su parte.
Por un lado, le señalaron que fue Hugo Chávez quien delegó en Rafael Ramírez, la importante tarea de dirigir PDVSA. Pero por otro lado, le recordaron su relación con el actor «Coco» Sosa, acusado también de malversar fondos de PDVSA.
Entre otros comentarios, le criticaron ostentar una fortuna, la cual obtuvo gracias a la malversación de recursos de la nación realizada por su padre.
Además, le recordaron los asesinatos ordenados por el fallecido narco tirano, así como su cercanía con Maduro, responsable directo de los asesinatos políticos más atroces, ocurridos en la historia del país.
Otros usuarios de la plataforma digital, opinaron que estos roces evidencian las fracturas irrecuperables, que hay a lo interno de la estructura chavista.
También hay que destacar, que varias de las críticas que recibió la hija del difunto expresidente, fueron realizadas por militantes del PSUV, quienes le criticaron sus nexos con el madurismo, movimiento al cual acusan de destruir el supuesto «legado de Chávez».