EE. UU. no se plantea devolver a Ucrania las armas nucleares que le fueron arrebatadas después de la caída de la Unión Soviética, aseguró el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan.
«Eso no se está considerando, no. Lo que estamos haciendo es dotar a Ucrania con diversas capacidades convencionales para que pueda defenderse eficazmente y plantar cara a los rusos, no con capacidades nucleares», asevera Sullivan en un avance de una entrevista que emitirá la cadena ABC este domingo.
En su diálogo con el periodista y presentador Jonathan Karl, Sullivan también señaló que Washington hará todo lo que esté en sus manos, en los 50 días que le quedan al presidente Joe Biden en la Casa Blanca, para para fortalecer la posición de Kiev en el campo de batalla, «de modo que sean más fuertes en la mesa de negociaciones».
«Biden me ordenó que supervisara un aumento masivo del equipo militar que estamos entregando a Ucrania, de modo que hayamos gastado cada dólar que el Congreso nos ha asignado para cuando deje el cargo», explicó.
Cabe señalar que estas declaraciones se producen a raíz de reportes sobre la posible entrega de un arsenal de estas características a Ucrania. De acuerdo con un artículo de The New York Times publicado el 21 de noviembre, «funcionarios estadounidenses y europeos» habrían sugerido que Biden «podría permitir que Ucrania volviera a tener armas nucleares, como lo hizo antes de la caída de la Unión Soviética».
A juicio de estos supuestos funcionarios, «eso sería un disuasivo instantáneo y enorme, pero una medida de ese tipo sería complicada y tendría graves consecuencias», resalta la publicación.
Días después de la noticia, el portavoz presidencial de Rusia, Dmitri Peskov, aseguró que tales declaraciones provenían de un «flanco muy extremista» y que se trataba de una de un «razonamiento absolutamente irresponsable».
Al mismo tiempo, el expresidente ruso y vicepresidente del Consejo de Seguridad del país, Dmitri Medvédev, criticó esta «idea delirante», advirtiendo que «la amenaza misma de la entrega de armas nucleares al régimen de Kiev puede considerarse una preparación para un conflicto nuclear con Rusia».