El Departamento de Justicia de EE. UU. anunció este lunes que pagará en las próximas semanas alrededor de 2.700 millones de dólares a 5.361 víctimas de los ataques del 11 de septiembre de 2001.
Esta indemnización eleva a más de 6.000 millones de dólares la cantidad concedida a víctimas del terrorismo internacional y sus familias.
El Fondo para indemnizar a las personas afectadas por los ataques del 11-S fue establecido por el Congreso en 2015 y está gestionado por la Sección de Lavado de Dinero y Recuperación de Activos de la División Criminal (MLARS, por sus siglas en inglés).
Desde su establecimiento, el fondo ha distribuido ya 3.300 millones de dólares en cuatro rondas de pagos, y el anuncio hecho este lunes se suma a esa cantidad.
El Departamento de Justicia detalló en su comunicado que el número de reclamantes que cumplen con las condiciones establecidas ha aumentado de más de 2.000 en 2017 a más de 15.500 en la actualidad. De ellos, 12.117 son víctimas del 11-S y sus familiares, y 3.652 tienen reclamaciones relacionadas con otros actos de terrorismo internacional «patrocinados por el Estado».
En resumen, esta compensación financiera busca ofrecer apoyo a las víctimas y familias afectadas por los devastadores ataques del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos, que dejaron miles de personas fallecidas y heridas, y causaron un profundo impacto en el país y en el mundo entero.