El Consejo de la Federación de Rusia, la Cámara Alta del Parlamento, ha aprobado este miércoles una ley que prohíbe el acceso a la gestación subrogada para los ciudadanos extranjeros en el país.
Los senadores que han impulsado la medida han señalado que, de esta forma, se pone fin a los «delitos contra menores» que, al contar con padres extranjeros no pueden optar a la ciudadanía rusa a pesar de haber nacido en el territorio mediante el uso de vientres de alquiler.
En este sentido, la legislación establece que únicamente las ciudadanas rusas pueden actuar como vientres de alquiler en el territorio. La prohibición no se aplica en aquellos casos en los que el extranjero o extranjera en cuestión está casado con un ciudadano ruso.
«Eso evitará la discriminación de derechos a ciudadanos rusos por estar casados con extranjeros», ha explicado Vasili Piskarev, uno de los impulsores de la iniciativa.
La ley indica que a partir de ahora los menores deben obtener necesariamente la ciudadanía rusa si han nacido en Rusia, aunque sea mediante gestación subrogada, dado que la nueva normativa implica que la madre biológica tiene que ser rusa y que uno de los padres también lo sea.
La ley no impide a los padres trasladarse junto al menor a otro país de residencia y busca, según el texto, «proteger a los menores rusos». Esta medida permitirá las autoridades rusas competentes ejercer el control necesario sobre la salida del país de estos menores.