Después de las polémicas declaraciones del segundo al mando el Partido Socialista Unido de Venezuela, Diosdado Cabello, en la cual aseguraba que, “el que no vota, no come”, las reacciones de repudio a este discurso no se hicieron esperar.
El presidente de VEPPEX, José Antonio Colina, catalogó ese discurso como algo característico de un sistema perverso, “Diosdado Cabello lo que está mostrando allí, es la expresión más baja de una revolución nefasta,” continuó, “esto es el colmo de la miseria, es el colmo de la desgracia.”
Colina además afirmó que esto no era un chiste de mal gusto, sino más bien una amenaza para obligar a la gente a participar en la farsa electoral del 6 de diciembre, “él está hablando en serio, van a utilizar la comida para que la gente salga a votar.”
Por su parte, el activista político, Esteban Hernández, tildó ese discurso como “descarado” y “cínico”, enfatizando que Venezuela es un país con unos niveles de pobreza generalizados, “en un país en donde la hambruna está marcando el día a día de los venezolanos, es un descaro y algo inhumano.”
A juicio de Hernández, no se puede ser mas miserable que someter y amenazar a la gente con el hambre, “esto demuestra lo peor, lo más bajo que puede caer una persona. Está llamando a votar, jugando con el estómago de los venezolanos.”
Sin embargo, el activista no mostró su sorpresa pues lo ve como una práctica normal en los regímenes socialistas, “el socialismo, parte de lo que busca generar, es la miseria. Ellos buscan hacer a la gente dependiente de ellos.”