Caracas. – El gobierno de Curazao recomendó a sus ciudadanos evitar viajes hacia Venezuela hasta nuevo aviso, mientras que les pidió mantener la calma frente al reciente despliegue militar de EE. UU. en el mar Caribe, especialmente frente a las costas venezolanas.

El primer ministro de la isla, Gilmar Pik Pisas, se dirigió a la población a través de una publicación en la red Facebook, en la cual explicó que “nuestro pueblo puede estar tranquilo (…) La presencia militar en el Caribe es una medida preventiva y estratégica contra el tráfico de drogas”.

Asimismo, pidió a la población no viajar a Venezuela, al menos mientras duren los operativos militares liderados por EE. UU.

Cabe señalar que para el pasado 21 de agosto, el gobierno de Curazao ya había manifestado su respaldo a la operación de Washington, destacando que las embarcaciones norteamericanas pueden abastecerse en los puertos de la isla, como ocurre de manera habitual.

Pisas explicó que fue informado el 20 de agosto sobre la situación regional en una reunión con altos mandos de la Armada neerlandesa en el Caribe y del Servicio Nacional de Seguridad de Curazao.

También, a mediados de julio, la cancillería del Reino de los Países Bajos —del cual forma parte Curazao— notificó formalmente a las islas del Caribe Neerlandés en torno a los “riesgos de seguridad” inherentes a cualquier viaje a Venezuela.

De hecho, la Haya ubicó a Venezuela en la lista de países de “código rojo”, es decir, a los que recomienda no viajar por considerarlos “demasiado peligrosos”. “Los extranjeros en Venezuela corren el riesgo de ser arrestados sin una razón clara”, indica el documento, señalando que la situación se agravó tras la elección presidencial del 28 de julio de 2024.