Caracas. – El gobierno de República Checa comunicó este miércoles, su rechazo a las acusaciones recibidas desde el narco régimen que impera en Venezuela, sobre presuntamente participar en un plan para derrocar a Nicolás Maduro, aseverando que estas carecen de fundamentos.
La postura de Praga fue revelada por un comunicado dado a conocer, por el ministro de Relaciones Exteriores de ese país, Daniel Drake, quien aseguró que los señalamientos de la tiranía venezolana no tienen asidero.
«Todas las afirmaciones sobre la participación checa en un plan para derrocar al gobierno del líder venezolano Nicolás Maduro carecen de base real», expresó Drake.
También, la representación diplomática de ese país en Venezuela, solicitó información detallada sobre el caso y explicaciones sobre el ciudadano checo detenido el fin de semana. Mariana Wernerova, igualmente portavoz de Exteriores de República Checa, manifestó: “En esta nota solicitamos información detallada sobre el caso y un contacto consular. Nuestros diplomáticos están en contacto con colegas de los ministerios de Asuntos Exteriores de Estados Unidos y España”.
Las comunicaciones hacen referencia al caso del ciudadano checo, Jan Darmovzal, de 33 años de edad, reservista activo del 43º Regimiento de Paracaidistas del Ejército checo.
Este ciudadano fue secuestrado la semana pasada, en el marco de una trama que pretende involucrar a cuatro estadounidenses y dos españoles, en un supuesto plan magnicida anunciado por voceros de la Narcotiranía de Maduro.
Estados Unidos y España, al igual que República Checa, han exigido explicaciones al régimen venezolano sobre este presunto plan, negando todo vínculo con el mismo.
Justamente, los dos primeros países mantienen relaciones tensas con Maduro y su cúpula, por denunciar el robo electoral que este cometió, al reconocer como ganador legítimo a Edmundo González.