El secretario general del partido-milicia libanés Hezbolá, Hasán Nasralá, ha asegurado que el objetivo del ataque con proyectiles lanzado este domingo sobre Israel «se ha logrado» y ha desmentido en cambio la versión israelí sobre la destrucción de cientos de lanzaderas en territorio libanés.
«La narrativa israelí sobre lo sucedido está llena de mentiras, lo que refleja el nivel de debilidad de esta entidad (…). El objetivo de la operación se logró, y más», ha afirmado Nasralá en un discurso televisado.
Así, ha resaltado que «ninguna de las plataformas que participaron en el lanzamiento de los proyectiles fueron alcanzadas antes de la operación y sólo dos plataformas fueron alcanzadas después de la operación».
«Lo que bombardeó el enemigo fueron valles que estaban vacíos o evacuados», ha subrayado. En este sentido, el líder de Hezbolá ha dado detalles sobre el número de proyectiles lanzados.
«Queríamos lanzar 300 proyectiles, pero lanzamos 340», incluidos misiles Katiusha, ha asegurado, al tiempo que ha explicado que no se han empleado misiles estratégicos, «pero es posible que los utilicemos en el futuro y en un futuro próximo».
«El objetivo principal de los cohetes Katiusha era confundir al sistema Cúpula de Hierro, mientras alcanzaban sus objetivos los drones lanzados posteriormente.
«Nuestros datos indicaron que varios drones alcanzaron estos dos objetivos [la base de inteligencia Aman y la base de la Unidad 8200], pero el enemigo permanece en silencio como de costumbre», ha destacado.
Nasralá también ha rechazado la afirmación israelí de que han sido ataques indiscriminados contra la población civil y ha explicado que el objetivo han sido instalaciones militares relacionadas con el ataque del mes pasado en el que murió el comandante de Hezbolá Fuad Sukr en un ataque aéreo atribuido a Israel en la capital del país, Beirut.