Caracas. – Ante el temor de las acciones que puedan resultar de la campaña «Ya casi Venezuela», el ministro chavista de defensa venezolano, Vladimir Padrino López, realizó advertencias al exmilitar estadounidense, Erik Prince, además de ordenar el desarrollo de simulacros militares en la frontera.
Padrino López ofreció declaraciones televisadas este pasado viernes, en las cuales hizo señalamientos a la campaña promovida por Prince, que tiene como meta recaudar $10 millones, y de los cuales ya suma $1 millón, que serán destinados a «restaurar la democracia en Venezuela».
“Este señor Erik Prince (está) amenazando, de manera abierta, que viene para acá (…) ellos deben saber que nosotros no estamos desarmados. Van a recibir una respuesta contundente, en primera línea, de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB)”, dijo el militar chavista, a pesar del mal momento que atraviesan las fuerzas armadas del país en cuanto a deserciones, mal equipamiento y falta de personal.
De hecho, este pasado miércoles se llevó a cabo un supuesto simulacro «cívico-militar», con el supuesto objetivo de repelar el presunto ingreso de mercenarios hacia el territorio nacional.
Este ejercicio fue escenificado a la altura del puente internacional Atanasio Girardot, el cual une a Táchira con el departamento colombiano de Norte de Santander. En el ejercicio participaron efectivos de la GNB y el CICPC, pero quienes estuvieron al frente fueron milicianos del PSUV, quienes en realidad son ciudadanos de avanzada edad sin ningún tipo de calificaciones para enfrentar una eventual incursión militar.
Aun así, Padrino asevera que la supuesta invasión promovida por Prince “no va a ocurrir”, porque sus mercenarios se encontrarían a un “pueblo que no va a permitir jamás que se derrame sangre (en Venezuela) porque les dio la gana a los imperialistas del norte”.
Aunque la campaña planteada por Prince ha generado muchas dudas y, aparentemente, carece de confiabilidad, continúa su desarrollo, y el exmilitar estadounidense ha asegurado que no se trata de una estafa.
No obstante, la recolección de fondos para financiar una operación con mercenarios parece haber hecho mella entre los funcionarios del narcorégimen, dado que han obligado a Padrino a pronunciarse y a organizar una especie de preparación, en caso de presentarse un escenario bélico.