El equipo de campaña del expresidente y candidato del Partido Republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, ha presentado una queja ante la Comisión Federal Electoral (FEC, en inglés) por el traspaso de los fondos recaudados por la campaña del presidente, Joe Biden, a su vicepresidente, Kamala Harris, tras renunciar a la reelección.
El asesor general de campaña de Trump, David Warrington, ha argumentado que Harris, que ya presentó su candidatura tras el abandono de Biden, «está tratando de perpetrar un robo de USD$ 91,5 millones de dólares del dinero sobrante de la campaña de Joe Biden».
«Es un robo descarado de dinero que constituiría la mayor contribución excesiva y la mayor violación en la historia de la Ley de Campaña Electoral Federal de 1971», ha subrayado el equipo de campaña en un escrito recogido por CNN.
El equipo de campaña acusa a la tesorera de la campaña de Harris, Keana Spencer, de «violar flagrantemente la ley al hacer y recibir una contribución excesiva de casi USD$ 100 millones».
También, se le acusa de «presentar formularios fraudulentos ante la comisión pretendiendo reutilizar el comité de campaña principal de un candidato (Biden) para el uso de otro (Harris).
Ai bien, el equipo de Harris ha salido rápidamente al paso de la demanda y su portavoz de campaña, Charles Kretchmer Lutvak, ha acusado a los republicanos de estar «celosos» de que los demócratas están «motivados para derrotar a Donald Trump» y sus aliados seguidores del movimiento «Make America Great Again» (MAGA).








