El presidente de Argentina, Javier Milei, descalificó las protestas que estallaron contra el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que anunció el miércoles por la noche, expresando que de alguna manera extrañan a quien tanto les ha hecho daño.
«Puede ser que haya gente que sufre el síndrome de Estocolmo, están abrazados al modelo que los empobrece, pero esa no es la mayoría de la Argentina», dijo el mandatario en una entrevista con Radio Rivadavia.
Además, aseguró que «también hay gente que mira con nostalgia, amor y cariño al comunismo», mientras advirtía que en los próximos días dará a conocer otras iniciativas que transformarán de manera radical a la sociedad del país sudamericano.
«Les aviso que hay más. Pronto se van a enterar. Vamos a llamar a extraordinarias y enviar un proyecto de ley para la modificación del Estado», afirmó en medio de la tensión social provocada por las medidas que anunció en cadena nacional.
«Hemos detectado, entre leyes y otras normativas que dificultan el funcionamiento de una sociedad libre, cerca de 380.000 regulaciones. Estamos trabajando en desmontar esa máquina de destruir en la que se convirtió el Estado argentino», señaló.
En este sentido, Milei reconoció que algunas de sus decisiones son «antipáticas», pero aseguró que las toma para evitar una hiperinflación, a pesar de que economistas de todas las tendencias han descartado que exista este riesgo.