Por Ricardo Guanipa D’Erizans
Los resultados electorales en Barinas tienen tres lecturas, la primera: Que la familia Chávez ya gozan del repudio de los venezolanos, que ese mito del delincuente eterno ya no existe.
Hugo Rafael Chávez Frías, quien se dedicó a destruir Venezuela y saquear el patrimonio público gracias a sus instintos criminales que hasta se robó el oro de las reservas internacionales, solo para saciar su sed de ladrón, estafador, y de anti venezolano, pero ahí están las consecuencias, Venezuela es un polvorín, Barinas va arder en cualquier momentos y las propiedades robadas por la familia Chávez, el mismo pueblo le meterá candela como venganza de tanta necesidad que ha pasado y sigue pasando el venezolano con la falta de empleos, alimentos, medicamentos, corrupción policial, judicial, militar, gubernamental, un nivel de degradación moral como nunca lo había experimentado Venezuela en su historia Republicana.
Ese voto en contra de Argenis Chávez en Barinas es el comienzo del fin del chavismo, por ende, el fin del régimen y el cartel del narcotráfico del PSUV que lo integran ciudadanos enemigos públicos de los venezolanos, que serán tratados de la misma forma con la que el pueblo hizo justicia con sus propias manos el 23 de enero de 1958 una vez fuera derrocado el dictador Marcos Pérez Jiménez, tengo la absoluta seguridad de que los veré colgados.
La segunda lectura: Es la demostración que en Venezuela se vota pero no se elige, el robo de la gobernación a Superlano es la más aberrante violación a la Constitución y a las normas electorales.
Que a nadie le quede dudas que lo ocurrido en Barinas tomó por sorpresa al PSUV y a la propia familia Chávez quienes pensaron que le puede mentir todo el tiempo al pueblo, cuando en verdad solo se puede mentir un tiempo al pueblo, en consecuencia, a cada cerdo le llega su domingo.
Pero de un plumazo se anuló la elección donde salió derrotado el hermano de Hugo Chávez, es que esos totales han sido letales para darle muerte electoral al PSUV, por eso el chavismo sin educación ni escrúpulos apela a la trampa, al fraude, al robo, la mentira, la confusión inventa una nueva elección en Barinas con la participación de 30 candidatos, ninguno de oposición legitima, solo participan algunos jineteros políticos pagados por el madurismo insolente como es el caso de Claudio Fermín.
En conclusiones, Venezuela vive una narco dictadura dura y pura que nunca entregara el gobierno a través del voto, esos delincuentes saldrán solo a balazos y hay muchos venezolanos que ya están cargando con municiones sus armas.