Caracas. – La ONU renovó este viernes el permiso a la Misión de Determinación de los Hechos sobre Venezuela, así como del mandato sobre la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para Derechos Humanos, para que continúen documentando, por dos años más, los crímenes de lesa humanidad en Venezuela.
La resolución que incluía esta prórroga fue aprobada por 23 votos a favor, seis en contra (Argelia, China, Cuba, Eritrea, Sudán y Vietnam) y 18 abstenciones en la última jornada de la 57ª sesión del Consejo.
Esta propuesta constituye, además, la segunda renovación del mandato de este mecanismo especial y de la Oficina del Alto Comisionado para que se encargue de revisar, desde diferentes perspectivas, las “graves vulneraciones” de derechos humanos en el país, como lo expresaron los Estados proponentes.
Desde 2014, la Misión aplica un “enfoque particular”, sobre las ejecuciones extrajudiciales, desapariciones forzadas, detenciones arbitrarias, tortura, al igual que violencia sexual y de género, que se han venido cometiendo en Venezuela.
De hecho, la resolución aprobada indica, que «la aprobación de esta resolución es crucial dada la grave crisis política y económica que enfrenta Venezuela.
Cabe señalar que, desde 2019, la Misión y el Alto Comisionado han documentado violaciones sistemáticas de derechos humanos, que van desde ejecuciones extrajudiciales y torturas hasta detenciones arbitrarias.
La renovación de sus mandatos permite que este trabajo vital continúe, proporcionando un marco para la recopilación de pruebas y testimonios que son esenciales para cualquier futuro proceso de justicia, tanto a nivel nacional como internacional».
La misión, creada por el propio Consejo de Derechos Humanos en 2019, está presidida por la jurista portuguesa Marta Valiñas y la completan los expertos Francisco Cox (Chile) y Patricia Tappatá (Argentina).