Andrés Díaz: “La tiranía de China no ha respondido por absolutamente nada”

El activista político y fundador de Libertario, Andrés Díaz, denunció a través de sus redes sociales la impunidad de la cual se ha beneficiado el Partido Comunista Chino y su tiranía dirigida por Xi Jinping, al no haber recibido ningún tipo de sanciones debido a la irresponsabilidad y manipulación de la información con respecto al coronavirus.

Díaz recordó que las muertes y recesiones económicas, son responsabilidad directa del país asiático, “ya es un año desde que inició la pandemia, y el mundo parece haber olvidado cómo es que caímos en esta desgracia.”

El activista hizo un llamado a los organismos internacionales y a los gobiernos a tomar las acciones necesarias en contra de la tiranía comunista, “La tiranía del PCC sigue campante, sin haber respondido por absolutamente nada, ni siquiera por la persecución de todas aquellas voces que advertían el peligro,” señaló.

Nelson Ramírez a medios de comunicación: «Están amordazando a Venezuela»

En una manifestación en contra de los medios de comunicación que catalogaron como ‘cómplices’ de la tiranía venezolana, el Movimiento Nacionalista ORDEN, expresó su rechazo al comportamiento que las plataformas comunicacionales han mostrado en Venezuela.

A través de su coordinador nacional, Nelson Ramírez, criticaron la parcialidad que estos tienen en favor de los partidos políticos tradicionales, «ustedes saben que existimos, y aún así, se hacen los locos, girando la vista hacia otro lado, para continuar generando las matrices de opinión de la agenda mediática de partidos políticos caducos y vendidos a la tiranía.»

Así mismo, Ramírez expresó que la mayoría de los ciudadanos comparten ese sentimiento de disgusto hacia el actuar de los medios, «llegamos acá como una expresión de lo que muchos venezolanos cayan y no se ven representados en esas pantallas.»

El activista además recordó que el trabajo de los medios de comunicación es informar, y deberían ser la mayor representación de la libertad de expresión de una nación, «ustedes, presos de la mordaza autoimpuesta, están amordazando a Venezuela también.»

Cazando al fantasma de la xenofobia por toda Latinoamérica

Por Nixon Piñango

@nixon_pinango

El pasado 11 de marzo de 2021, Claudia López, alcaldesa de la ciudad de Bogotá, pronunció unas palabras lamentables mientras relataba el asesinato de un patrullero ante medios de comunicación colombianos. Para ella, no bastó que alguien matara a la víctima y que mereciera soportar todo el peso de la ley, sino que uno de los asesinos, al ser venezolano, le serviría de excusa para dar una advertencia fuera de lugar sobre lo mala que es la señalada nacionalidad.

La actitud de esta señora, además, comporta una tremenda falta de autoridad moral: en primer lugar, ha criticado a Donald Trump por tener un discurso muy similar al que ella misma pronunció y que se resume en que «la delincuencia aumenta por culpa de los inmigrantes», y en segundo lugar está su propia realidad personal, pues seguro no habrá aprendido nada de la intolerancia que sufriría por su lesbianismo. 

Pero peor que ella es la Princesa Panameña, la desagradable señora Zulay Rodríguez, quien todas las semanas se para en la tribuna del parlamento de su país para soltar sapos y culebras por su boca y dirigirlos en contra de los extranjeros, especialmente venezolanos y colombianos. «Deslenguada y belicosa», como la describió Jaime Bayly, ella pertenece al partido gobiernista y justifica su xenofobia en que los venezolanos supuestamente califican de feas y gordas a las mujeres panameñas. Pero también tiene poca autoridad moral pues su propio padre, el fallecido ex-procurador panameño Rafael Rodríguez, fue exiliado político durante el régimen narco-militar de Manuel Noriega, primero en Venezuela (nada más y nada menos) y luego en Estados Unidos.

Los venezolanos no sólo sufren xenofobia en Colombia y Panamá, les pasa en prácticamente todos los países latinoamericanos, salvo honrosas excepciones como Argentina y Uruguay. Y es que hablar de inmigración supone mover un nervio sensible en ciertos sectores, independientemente de ideologías. Es una bandera que, por desgracia para estos tiempo supuestamente modernos, consigue votantes a raudales.

«El Duque de Alba se quedó en España»

En una de sus electrizantes entrevistas, el Dr. Carlos Rodríguez Braun relató una anécdota en la que él le preguntaba a su madre cómo eran sus antepasados españoles, y ella respondía: «El Duque de Alba se quedó en España», una clara referencia a que los grandes movimientos migratorios son protagonizados por dos tipos de personas, quienes huyen de la pobreza y quienes huyen de la guerra. Aunque en el fondo, quien escapa de un conflicto armado, escapa de una crisis, lo que, para efectos prácticos, significa que todo fenómeno migratorio es esencialmente económico.

Es muy difícil que la gente con buen estatus se vaya de su país aun si este último atraviesa por momentos complicados. La emigración de los acomodados es minoritaria y se debe básicamente a persecuciones o ensañamientos, pasó de hecho con la clase media alta venezolana, que huyó entre 2008 y 2013 a los Estados Unidos y Europa después de haber sufrido secuestros y demás tratos directos con el hampa organizada, la peor epidemia de esos años.

A los recipientes no les molestaba esa inmigración, evidentemente. El que llega con dinero es bien recibido porque está esa sensación de que no quita sino que aporta, una idea tan extendida como errada. No sólo los ricos que emigran aportan, también lo hacen los pobres: un pobre emigra a consciencia de que su país de origen se quedó sin oportunidades, y eso implica que le interesa crecer personalmente. A su vez, quien emigra con el objetivo de crecer, casi siempre genera valor; busca empleo, demanda bienes y servicios con sus ganancias, y beneficia a todos en el proceso. Incluso es mejor su ahorro destinado a inversiones con el potencial de multiplicar las oportunidades disponibles.

La prosperidad de muchos países se debe, más allá del marco jurídico que garantiza un buen ambiente para los negocios, a la constante entrada de personas a su espacio geográfico. El inmigrante es un valor que se suma al sistema productivo sin que este último haya tenido que invertirle previamente, y el caso de los venezolanos es muy ejemplarizante en este respecto: buena parte tiene estudios de alto nivel y experiencia laboral diversa, pues Venezuela era (y sigue siendo a duras penas) un país industrializado, con una actividad económica vertiginosa.

En Uruguay, donde vivo actualmente, han sabido aprovecharse bien de tal realidad permitiendo a los venezolanos regularizar su situación migratoria sin tantas complicaciones. Existen venezolanos ejerciendo en todo tipo de áreas dentro del país rioplatense, yo mismo trabajé durante un tiempo en el rubro de la publicidad y el mercadeo, una de mis especialidades. Y la razón por la cual la política migratoria uruguaya se ha mantenido así por años es su estancamiento poblacional. No obstante, también podemos hablar de buena integración de venezolanos en países como Argentina y Chile, lo que claramente desmiente ese camelo de que los inmigrantes «quitan empleos» y «compiten de forma desleal».  

Es verdad que los números tienen mucho que ver en el trato hacia el forastero; nadie niega que los ciudadanos de un país tengan derecho a sentirse abrumados por la cantidad de gente que de golpe y porrazo entra. De las naciones australes de América, la que más migrantes venezolanos tiene es Chile, una cifra que ronda los trescientos mil, que si bien parece mucho, no se compara con el Perú, que tendrá de un millón a un millón doscientos mil, y menos con Colombia, donde se pisan los dos millones.

Es entendible que exilios abrumadores supongan traumas para los países de acogida, sobre todo si estos no fueron receptores de inmigrantes en el pasado. Si bien está la disposición de la gran mayoría de exiliados a integrarse, su entrada masiva se traduce en colapsos: el ritmo de creación de empleo no es tan vertiginoso y depende de la flexibilidad de las regulaciones, lo que fomenta la tan mal vista informalidad. También está la vivienda, cuya demanda crece de manera estrepitosa y con ella el precio.

Y además es inevitable que se cuele una que otra lacra social, personas que van a cometer crímenes o a beneficiarse de ayudas sociales financiadas con las contribuciones nacionales. Aquí me quiero detener un poco porque, como expliqué anteriormente, los expatriados no se van de sus países con el propósito de ser una carga para nadie. Realmente el tema de los crímenes y los flojos es tan minúsculo que resulta cómico que sea utilizado por políticos xenófobos como su principal bandera.

Para cometer crímenes hace falta tener experiencia de campo; a un delincuente no le basta el deseo de salir a robar para hacerlo, debe estar consciente de cómo se organiza el crimen en su contexto elegido o correría el riesgo de ser depurado de forma inmediata, como pasa sobre todo en Latinoamérica, que no es un continente pacífico. Por eso, si vemos las cifras de criminales venezolanos que han sido capturados en Colombia, Ecuador, Perú y Panamá, evidenciaríamos que es irrisoria, ni llegará al uno por ciento del total de capturas.

Contaré una anécdota: en días recientes vi una noticia en el portal de noticias montevideo.com.uy sobre una venezolana capturada infraganti mientras intentaba enviar paquetes de cocaína a Tailandia. Por supuesto, las redes sociales exploraron con la noticia y obviamente salieron los infaltables comentarios de que Uruguay sufría los embates de una inmigración descontrolada. No obstante, también hubo comentarios más sensatos como: «es la primera vez que escucho de un venezolano cometiendo un crimen acá», cosa que es cierta. Tengo casi tres años como residente de este país y nunca había escuchado de venezolano que hubiesen cometido crimenes.

Entonces, que individuos como la señora López en Colombia y la Princesa Panameña se pongan con esa de que «los venezolanos son los culpables de nuestras desgracias», sólo indica el nivel de demagogia al que está dispuesta a llegar cierta clase política para obtener favores. Utilizan estos argumentos para infringir terror en el ciudadano y que éste, al salir a la calle y encontrarse rodeado por no-nacionales, sienta la necesidad de que un Estado le proteja a punta de coacción.

Los que se mueven también son seres humanos

Más que cualquier otra cosa, el tema de las migraciones me toca muchísimo las fibras. Ahora soy extranjero porque salí de Venezuela en 2018 en un momento muy convulso, no sólo del país, también de mi vida personal. Experimenté en carne propia lo que se siente. Si bien ha sido una anécdota muy enriquecedora (sobre todo a nivel literario), no es algo que recomiende, y menos si ocurre de manera forzada. Resulta difícil describir las consecuencias emocionales que provoca el hecho de huir de un país calamitoso, pero lo peor son esas posiciones incómodas en las que te encontrarás si no preparaste bien tu salida.

Jamás había sido tan complicado mudarse de un país a otro como en el presente, pues se requieren papeleos exhaustivos, pensados justamente para dificultar eso que a los liberales nos gusta: el libre tránsito de personas y mercancías. En ese sentido, Latinoamérica es un caso penoso, tanto que sus politiqueros se llenan la boca con críticas hacia el enrevesado sistema migratorio estadounidense, cuando en sus propios países la gente tarda años en obtener estatus legales, y no por culpa de las normas, sino de la burocracia.

Es increíble además cómo las sociedades se desmemorian en un dos por tres y les hacen sufrir a los inmigrantes lo que a ellos no les hicieron sufrir cuando estuvieron la misma posición. Yo, que pertenezco a la generación del milenio, todavía recuerdo cómo incluso en los primeros años del chavismo seguían llegando personas de todas partes de Latinoamérica a vivir en Venezuela. Durante el Siglo XX el país recibió gente de todas partes del mundo, pero no fue sino hasta los setentas que los ingresos se volvieron masivos, la mayoría provenientes de países vecinos y Europa, y no estoy hablando de miles, sino de millones.

Venezuela no sólo acogió al papá de la Princesa Panameña, sino a muchos familiares de quienes hoy despotrican del exilio venezolano. Sin ir muy lejos, tengo una cuñada con ascendencia árabe, una con ascendencia armenia y una con ascendencia colombiana. En mi país se les reconoció el derecho a la identidad y se les dio facilidades para trabajar y prosperar. Tal es así, que buena parte de la clase media alta venezolana estuvo formada en sus buenos tiempos por personas extranjeras que pudieron prosperar con ahorro y trabajo duro.

Yo no soy un patriota, por eso no celebro a próceres ni banderas, pero sí me enorgullece haber nacido en un país que en su momento tuvo una calidad de civilización tal que el hecho de que alguien fuera inmigrante no suponía un tema, un país donde hubo presentadores de televisión, músicos y demás gente muy amada que no había nacido en el territorio nacional, donde el crimen lo pagaba la persona y no el gentilicio, donde hubo la cantidad justa de prejuiciosos para asumir que no estábamos en un país perfecto, pero sólo eso… Esa civilidad mía se la debo a Venezuela, a nunca haber escuchado en mi entorno familiar o cercano un insulto contra un extranjero.

El punto de vista liberal-libertario

Las fronteras son mecanismos arbitrarios que tienen los Estados para ejercer su poderío sobre determinados territorios y poblaciones. La mayoría fueron demarcadas a lo bestia, sin tomar en cuenta razones históricas, étnicas, etc., y son ahora los principales focos de conflictos armados. Simplemente se recurrió en su momento a la regla y al compás, y a la disposición de tres o cuatro oligarcas del primer mundo que querían repartirse la tierra como botín.

Las fronteras provocan alergia a los liberales porque suponen la consolidación del poder político, que ha hecho uso de la fuerza para obligarnos a aceptar conceptos como el de patria, que no son más que técnicas para aislarnos del resto y así controlarnos más fácilmente. Es así como, mientras más férrea sea una frontera, menos amiga de la libertad sería y más mensajes de hostilidad enviaría al exterior.

El mundo que tenemos hoy es, lamentablemente, un lugar de límites inflexibles donde el resguardo no sólo se ejerce con las armas sino con la burocracia, y es que para entrar o salir de la gran mayoría de países se necesita más que un simple documento de identidad, se requieren trámites inocuos que sólo sirven para justificar los sueldos de un montón de parásitos.

Si bien mi ideal anárquico supone un mundo de tránsitos enteramente libres, no estoy acá para proponer idilios irrealizables en el corto plazo. En tal sentido, como radical libertario podría conformarme con un modelo migratorio similar al uruguayo, donde una persona no necesita más que un pasaporte (o cédula) y un certificado de antecedentes penales para poder vivir y trabajar en el país.

No sería más que permitir a los seres humanos decidir sobre el entorno donde quieren prosperar. También aunaría a esto lo que hacemos cada vez que publicamos esta clase de artículos: promover la mentalidad libertaria, porque no se trata de que se acoja a los inmigrantes como si fueran bebés de pecho (el modelo europeo), sino de (como hace el Estado uruguayo) regularizarlos para que puedan trabajar y tributar como cualquier otro ciudadano.

Un sistema migratorio así de amigable provocaría que los éxodos, que seguirán ocurriendo nos guste o no, sean fenómenos menos traumáticos para las partes involucradas; permitía además que no se pierda el flujo natural de las cosas y que nazcan nuevas y prósperas instituciones a partir de los enriquecedores intercambios culturales.

El Washington Post admite haber inventado frases en llamada de Trump con investigadora electoral de Georgia

El reconocido medio de comunicación, Washington Post, que denunció las presiones que el expresidente de los Estados Unidos, Donald Trump, le hizo al secretario de estado de Georgia cuando estaba denunciando el presunto fraude electoral de las pasadas elecciones presidenciales, admitió haber inventado citas y frases emitidas por el exmandatario.

Entre las frases que se le atribuyeron al expresidente fue la orden de «encontrar el fraude» a los representantes de Georgia, que en realidad fue una petició de hacer un escrutinio de los votos porque encontrarían «deshonestidad» allí.

Después de dos meses de la publicación original, el Washington Post hizo la siguiente correción: «El estado de secretario de Georgia publicó un audio de una llamada del presidente Donald Trump con la principal investigadora electoral del estado. El audio reveló que el Post citó mal los comentarios de Trump en la llamada, basados en la información otorgada por una fuente. Trump no le dijo a la investigadora que ‘encontrara el fraude’ o que sería ‘una heroína nacional’ si lo hacía. De hecho, Trump le urgió que hiciera un escrutinio en las boletas electorales del condado de Fulton, asegurándole que encontraría ‘deshonestidad’ allí. También le dijo que ella tenía ‘el trabajo más importante del país en estos momentos’.

Varios comunicadores, comentaristas, periodistas y políticos han exigido la renuncia del responsable de este acto de desinformación, por no haber corroborado a profundidad lo que la fuente del medio les había afirmado.

Se debe recordar que una de las pruebas que se utilizó en contra de Trump durante su segundo juicio político, fue este reporte del Post que fue manipulado.

ORDEN protesta contra medios de comunicación ‘cómplices’ de la tiranía

El Movimiento Nacionalista ORDEN se desplegó este lunes 15 de marzo en las calles de Caracas en un grupo de aproximadamente treinta motocicletas, denunciando la complicidad de los Medios de Comunicación con los supuestos partidos políticos de oposición que sostienen la Tiranía Socialista qué tiene secuestrada a Los venezolanos.

En ese sentido, ORDEN protestó en frente de varios medios de comunicación ubicados en la capital, como el canal de televisión Televen y el diario El Nacional. Nelson Ramírez, Coordinador Nacional de ORDEN, manifestó: «ustedes saben qué existimos, sin embargo giran su vista para otro lado para continuar con la agenda mediática de los caducos y vendidos partidos políticos, dejen de ser complices de la censura» agregando qué los medios conocen el crecimiento de nuevas alternativas políticas al Chavismo y a la MUD, pero que se mantienen en silencio, ocultando a los ciudadanos la existencia de organizaciones como ORDEN, y manteniéndose al servicio del status quo partidista qué ha mantenido a Venezuela en la miseria durante las últimas dos décadas.

«Silenciarnos es temerle a la verdad» fue otras de las consignas de la actividad.

ORDEN también hizo un llamado a los venezolanos a despertar de la apatía actual, no ser parte del silencio impuesto, e integrarse Al Despertar de la Nación.

John de la Vega hace un llamado a la responsabilidad sobre el TPS: “Me están llegando muchos rumores de pasillo”

Tras la aprobación del Estatus de Protección Temporal (TPS) para los venezolanos en los Estados Unidos, las mentiras se han proliferado en el tema migratorio, así lo denunció en sus redes sociales el reconocido abogado de inmigración, John de la Vega.

De la Vega, instó a los venezolanos a ser responsables y a buscar asesoría y ayuda de un experto si hiciera falta, “cuidado con lo que le digan la gente en la calle,” advirtió.

Así mismo, el abogado afirmó que ha sido testigo sobre la desinformación que se está tratando de imponer en la opinión pública, “ya me están llegando muchos rumores de pasillo y cuentos de camino acerca del TPS y la doble nacionalidad.”

De la Vega finalizó su mensaje asegurándole a las personas que, en algunos casos con detalles muy específicos, existen vías para beneficiarse del alivio migratorio, pero que se deben tomar en cuenta las consecuencias que esto pudiera traer, “hay maneras de argumentar estos casos y hay que saber los beneficios y consecuencias,” dijo el abogado en referencia a las aplicaciones para el TPS de quienes poseen doble nacionalidad.

https://twitter.com/johndelavegalaw/status/1371537723048218638?s=20

Régimen de Corea de Norte ignora a Joe Biden

Según la agencia de noticia Reuters, el régimen de Kim Jong-un, ha ignorado en reiteradas oportunidades a la administración de Joe Biden, que se ha tratado de comunicar con el dictador de Corea del Norte para tratar temas de seguridad, enfocados en los programas nucleares del país asiático.

“A través de distintos canales, empezando a mediados de febrero hasta la fecha, no hemos recibido ninguna respuesta de Pyongyang,” declaró la fuente que prefirió mantenerse en el anonimato.

Tanto el Secretario de Defensa de los Estados Unidos, Lloyd Austin, como el Secretario de Estado, Antony Blinken, tienen agendadas reuniones con representantes de países asiáticos como Japón y Corea del Sur la próxima semana, y se espera que mencionen la amenaza creciente que representa Corea del Norte debido a sus programas nucleares.

De acuerdo a la agencia de noticias BBC, la tiranía norcoreana, en sus medios de comunicación, no ha reconocido a Joe Biden como el presidente electo de los Estados Unidos. Se debe destacar que el actual presidente se refirió al dictador en varias oportunidades como un “matón”.

Trasladan a la expresidenta interina Áñez a un centro carcelario en Bolivia

Jeanine Áñex, expresidenta interina de Bolivia, denunció a través de sus redes sociales las arbitrariedades a las cuales está siendo sometida por el sistema de justicia boliviano, «el MAS decide y el sistema judicial obedece,» denunció.

Así mismo, Áñez hizo un llamado a los ciudadanos del país a «tener fé y esperanza» con la promesa de «entre todos levantar una Bolivia mejor» en un futuro.

De EFE

La expresidenta transitoria de Bolivia Jeanine Áñez fue trasladada este lunes hasta el Centro de Orientación Femenina de Obrajes, donde debe cumplir su detención preventiva mientras se realice la investigación por el caso denominado «golpe de Estado».

Áñez fue trasladada desde la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen, donde estaba detenida desde el sábado en la madrugada, hasta la cárcel de Obrajes en una vagoneta con un fuerte resguardo policial.

Migración Colombia desmiente a Claudia López y aclara que «Crímenes cometidos por venezolanos no superan el 6%»

Del Freedom Post

El director de Migración Colombia, Juan Francisco Espinoza, aclaró durante una entrevista para VPItv que la causalidad criminal en su país no esta asociada al migrante y resaltó la importancia de siempre recurrir a las estadísticas para señalar los hechos de este tipo.

“Siempre debemos basarnos en la estadística, lo que arroja esta situación en Colombia es que el crimen de migrante venezolano no ha superado el 6%”, informó.

Tras el revuelo que causaron las declaraciones de la alcaldesa de Bogotá Claudia López al acusar a  los venezolanos de los índices delictivos en la capital del país, Espinoza reiteró que el delito, no distingue nacionalidad y que cualquier acto delictivo cometido por una persona sin importar su origen tiene que ser objeto de investigación y judicialización.

Aclaró que “la gran mayoría de los migrantes venezolanos son gente que se comporta bien. Por eso la posición del presidente Iván Duque en apoyarlos”.

Proceso de regularización de venezolanos

Desde el pasado 1 de marzo están corriendo 90 días destinados a generar las pautas e informar a todos los migrantes venezolanos sobre cómo se realizará el proceso de regularización de ciudadanos a través del Estatuto Temporal de Protección aprobado por el presidente Iván Duque.

Entretanto, Espinoza aclaró que “los Permisos Especiales de Permanencia fueron prorrogados, es decir que no vencen, con lo cual se garantiza una mayor cobertura de regularidad».  En segundo lugar, explicó que todavía es perfectamente posible tramitar un Permiso Especial para el Fomento a la Formalización (PEPFF), en el caso de que las personas tengan ofertas de trabajo».

Espinoza recordó que se trata de una medida de regularización y apoyo a la población migrante venezolana. «En Colombia tenemos más de 1.7 millones de venezolanos, en donde básicamente vamos a cubrir a tres grupos: Los migrantes regulares, los migrantes irregulares y en tercer lugar aquellos venezolanos que ingresen de manera regular a territorio nacional los dos primeros años de vigencia de este Estatuto».

Recordó que el beneficio no aplica de manera automática a todos los migrantes, ya que es un trámite que se procesa uno a uno y si una persona representa un riesgo o tiene deudas pendientes con el estado colombiano, «el estado colombiano se reserva el derecho a negar esa cobertura, sobretodo si la persona tiene deudas con la justicia».

Reiteró que Colombia apoya al pueblo venezolano en su lucha por escapar de la devastadora crisis que los obliga a buscar otras tierras para establecerse, y apela siempre a la buena voluntad que la mayoría ha demostrado. «Creemos en el pueblo venezolano, es una gente absolutamente positiva, buena, resiliente, saliendo adelante y tenemos que apoyarlos de manera decidida».

Aun así destacó que este tipo de procesos de regularización migratoria como el que adelanta el gobierno de Iván Duque no se pueden hacer de un día para otro porque el migrante no sabría que hacer, es necesario un proceso de sociabilización y sensibilización.

Se mantiene cierre de la frontera

Al ser consultado por el cierre de fronteras entre Colombia y Venezuela, Espinoza informó que la medida esta proyectada hasta el 1 de Junio, sin embargo, «la apertura podría darse antes, en la medida en que las condiciones de pandemia se vayan normalizando».

La autoridad migratoria explicó que en este momento Colombia esta en fase de vacunación, haciendo un trabajo exhaustivo para lograr disminuir los contagios y bajar la presión en los centros de salud.  Dijo que la intención al mantener el cierre fronterizo es «evitar que colapse el sistema de salud o que se genere un gran contagio, contagio que tampoco distingue de nacionalidades», expresó.