De forma secreta y discreta, así fue descrita la llegada del tanquero iraní Forest a Venezuela, específicamente a la refinería El Palito, en Puerto Cabello, estado Carabobo.
El buque arribó el pasado 20 de febrero y según TankerTrackers.com, un servicio independiente de rastreo de envíos y almacenamiento de hidrocarburos, trajo consigo un cargamento de 44 millones de litros de combustible.
“Un cargamento de alrededor de 44 millones de litros de gasolina llegó en secreto a El Palito, Venezuela, procedente de Irán, a bordo del buque cisterna Forest. Esto es de acuerdo con nuestra investigación de seis semanas de seguimiento”
La llegada del tanquero iraní Forest: sin levantar sospechas
De acuerdo con la información recabada, con la llegada de este tanquero iraní Forest, se completa el tercer envío de combustible que hace Irán en auxilio al régimen de Nicolás Maduro en nueve meses.
Según reportes, hace tres semanas llegaron al mismo destino los buques Faxon y Fortune, también iraníes, cuya carga suma alrededor de 400 mil barriles.
No obstante, la llegada del Forest se hizo bajo perfil por parte del régimen venezolano, a diferencia de los buques recibidos con anterioridad que fueron anunciados incluso en las alocuciones de Maduro.
Igualmente, TankerTrackers.com aseguró que el transpondedor AIS a bordo del Forest, instrumento que transmite permanentemente la identidad, posición, velocidad y rumbo del buque, ha estado apagado desde el 11 de diciembre de 2020, cuando el tanquero cargó la gasolina en Irán.
Pero, luego pudieron hacer seguimiento y detectaron que “partió hacia Venezuela una semana más tarde. Lo hemos vigilado de cerca durante el viaje”.
Este tipo de acciones, como apagar los transpondedores en pleno traslado, se han vuelto técnicas comunes en las entregas o intercambios entre Irán y Venezuela para evitar ser vigilados y sancionados por los EEUU.
Entregas previas
Entre el 30 de enero y el 1 de febrero de 2021, el servicio de rastreo mencionado aseguró que el Faxon y el Fortune estaban fondeados en el muelle de Guaraguao, Puerto La Cruz. Sin embargo, resaltaron que la prudencia y manejo bajo perfil de estos buques iraníes pudiera deberse a que la gasolina que traen no es para surtir al venezolano común.
“A diferencia de las entregas anteriores, estos dos despachos de gasolina (el de Faxon y Fortune) se realizaron de manera opaca muy probablemente porque el ciudadano común no es el destinatario previsto”
TANKERTRACKERS.COM, HACE TRES SEMANAS
Finalmente, se demuestra cómo la crisis venezolana, en cuanto al combustible, seguirá siendo oxigenada por Irán al menos por algunos meses más. Esto además indica que la escasez de combustible va a continuar, pues si el régimen sigue dependiendo de Irán se denota una importante señal que Venezuela no tiene para producir la gasolina necesaria que requiere la nación.