Capriles contradice a María Corina y se opone a privatización de PDVSA

Caracas. – Henrique Capriles, candidato de Primero Justicia (PJ) ante las primarias, rechazó la privatización de PDVSA, en una clara crítica a la propuesta realizada por María Corina Machado, quien si se mostró de acuerdo en vender el ente a empresas privadas.

Así lo indicó el abanderado por la tolda amarilla durante su acto de juramentación este pasado viernes.“Hay muchas cosas que vamos a decir en este recorrido, que las vamos a defender. El petróleo, por ejemplo. El petróleo es del pueblo. ¿Qué, van a venir a quitarle el petróleo a la gente?”, manifestó Capriles en su discurso.

Igualmente acotó que “el problema que hay con el petróleo es que quienes gobiernan quebraron la industria petrolera”. Además, preguntó: “¿es que ahora se nos olvida lo que en algún momento era PDVSA?”.

Su postura es una indirecta a lo manifestado recientemente por María Corina Machado, quien en una entrevista con el medio Politiks, reveló su interés en privatizar muchos organismos del Estado, entre ellos PDVSA.

“Por supuesto que hay que privatizarla. Y no solamente PDVSA, las empresas de Guayana, los hoteles, las empresas de telecomunicaciones. Pregúntale a una persona que trabaja en Corpoelec, o PDVSA, o SIDOR, si quieren trabajar en una empresa pública o privada“, dijo la líder de Vente Venezuela en esa ocasión.

China logra un acuerdo histórico entre Irán y Arabia Saudita: Acuerdan reanudar relaciones diplomáticas

De Derecha Diario

Irán y Arabia Saudita, históricos rivales regionales, han acordado reanudar sus relaciones diplomáticas y reabrir las embajadas dentro de dos meses gracias a la mediación de Beijing.

Sin la participación del gobierno de Estados Unidos, país que está lidiando con un malestar interno por su involucramiento en la guerra en Ucrania, China logró un acuerdo histórico entre los dos rivales históricos de Medio Oriente, Irán y Arabia Saudita, dos naciones cuyas relaciones habían estado empeorado progresivamente desde la Revolución Islámica de 1979 en Irán.

El régimen chiíta con sede en Teherán y el reinado sunita con sede en Riad, dejaron de lado sus diferencias políticas, económicas y religiosas y acordaron este viernes restablecer relaciones diplomáticas plenas y reabrir sus embajadas en un período de dos meses.

Las embajadas habían sido retiradas siete años atrás cuando la hostilidad entre las naciones se volvió irreversible, lo cual generó un fuerte terremoto contra la estabilidad y la seguridad en el Golfo, y contribuyó en profundizar los conflictos en el Oriente Medio.

El acuerdo fue anunciado después de cuatro días de conversaciones previamente no reveladas en Beijing, sede de este tratado histórico que reunió altos funcionarios de seguridad de las dos potencias rivales, la árabe y la persa.

Teherán y Riad alcanzaron un acuerdo “que incluye reanudar las relaciones diplomáticas entre ambos y reabrir sus embajadas y misiones diplomáticas dentro de un periodo que no exceda los dos meses”, según se lee un comunicado conjunto emitido por Irán, Arabia Saudita y China.

El acuerdo incluye su afirmación del respeto a la soberanía de los estados y la no injerencia en los asuntos internos“, incluyó el mismo. Un punto extremadamente importante ya que ambas naciones estaban en pleno conflicto intentado imponer su agenda sobre la otra en el resto de los países de la región.

Además, en el acuerdo, que fue firmado por el principal funcionario de seguridad de Irán, Ali Shamkhani, y el asesor de seguridad nacional de Arabia Saudita, Musaad bin Mohammed al-Aiban, se decidió reactivar un acuerdo de cooperación de seguridad que había sido firmado en 2001, así como otro pacto anterior sobre comercio, economía e inversión.

También acordaron implementar el Acuerdo de Cooperación en Seguridad entre ellos, que se firmó el (…) 17/4/2001, y el Acuerdo General de Cooperación en los Campos de la Economía, el Comercio, la Inversión, la Tecnología, la Ciencia, la Cultura, el Deporte y la Juventud, que se firmó el (…) 27/5/1998“, agregó la declaración trilateral.

Riad, Teherán y Beijing “expresaron su entusiasmo por ejercer todos los esfuerzos para mejorar la paz y la seguridad regionales e internacionales”, continuó el comunicado conjunto.

Musaed bin Mohammed Al-Aiban, Asesor de Seguridad Nacional de Arabia Saudita, y Ali Shamkhani, Secretario del Consejo Supremo de Seguridad Nacional de Irán

Los medios estatales iraníes publicaron imágenes y videos de Ali Shamkhani, secretario del Consejo Supremo de Seguridad Nacional de Irán, con el asesor de seguridad nacional saudí, Musaad bin Mohammed al-Aiban, y Wang Yi, el canciller y diplomático de más alto rango de China.

Después de implementar la decisión, los ministros de Relaciones Exteriores de ambas naciones se reunirán para prepararse para un intercambio de embajadores“, aseguró la televisión estatal iraní.

En las imágenes transmitidas por los medios iraníes, Wang ofreció “felicitaciones de todo corazón” por la “sabiduría” de los dos países. “Ambas partes han mostrado sinceridad“, señaló, agregando que “China apoya plenamente este acuerdo“.

Como mediador de “buena fe” y “confiable”, China ha cumplido fielmente sus deberes como anfitrión del diálogo, y ha logrado poner a las dos naciones de su lado al mismo tiempo, algo que Estados Unidos intentó por décadas pero desde 1979 no podía.

Adicionalmente, el máximo diplomático de China describió el acuerdo como una victoria para el diálogo y la paz, y agregó que Beijing continuará desempeñando un papel constructivo para abordar los difíciles problemas globales.

La agencia estatal de noticias iraní IRNA citó a Shamkhani calificando las conversaciones en Beijing como “claras, transparentes, integrales y constructivas”, y ya comenzó la fuerte propaganda en los medios persas para convencer a la población que su enemigo jurado, Arabia Saudita, ahora no es tan malo.

Eliminar los malentendidos y los puntos de vista orientados al futuro en las relaciones entre Teherán y Riad definitivamente conducirá a mejorar la estabilidad y la seguridad regionales, así como a aumentar la cooperación entre las naciones del Golfo Pérsico y el mundo del Islam para manejar los desafíos actuales“, dijo Shamkhani.

Imagen representativa de la rivalidad entre Irán y Arabia Saudita

La noticia cayó como un baldazo de agua fría en la Casa Blanca, quienes están hace tiempo intentando mejorar las relaciones con ambos países por separado. Por un lado, Biden intentó mejorar las relaciones con Arabia Saudita para que el país líder del OPEP aumente su producción de petróleo y permita una reducción del precio del barril internacional. A pesar de reiterados intentos con un viaje personal del presidente demócrata a Riad, no tuvo éxito.

Luego, desde su vuelta al poder en 2021, el Partido Demócrata está intentando restaurar el pacto nuclear con Irán, pero las protestas que estallaron en el país islámico tras el asesinato de Mahsa Amini por no estar utilizando el hijab socavaron estos esfuerzos.

Externamente, el gobierno demócrata intentó mantener la compostura, y esta mañana tras el anuncio, el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca dijo que Estados Unidos está al tanto de los informes de que Irán y Arabia Saudita han reanudado las relaciones diplomáticas y dan la “bienvenida” a las nuevas relaciones bilaterales.

En términos generales, damos la bienvenida a cualquier esfuerzo para ayudar a poner fin a la guerra en Yemen y reducir las tensiones en la región de Medio Oriente“, dijo el portavoz a la agencia de noticias Reuters. “La desescalada y la diplomacia junto con la disuasión son pilares clave de la política que el presidente Biden describió durante su visita a la región el año pasado“.

No obstante, el hecho de no participar en las negociaciones para alcanzar un acuerdo histórico de este tipo ha dejado muy preocupado al gobierno de Estados Unidos, cuyos lazos estratégicos de larga data con Arabia Saudita se han tensado bajo la administración de Biden, quien criticó fuertemente durante su campaña electoral al reino saudí por su participación en la muerte del periodista Jamal Khashoggi, la guerra en Yemen y, más recientemente, los lazos con Rusia y el recorte de la producción de petróleo de la OPEP+ en busca de aumentar los precios del crudo. En contraste, los crecientes lazos de Arabia Saudita con China se destacaron por la visita de alto perfil del presidente Xi Jinping hace tres meses.

El presidente iraní, Ebrahim Raisi, visitó Beijing el mes pasado, y el dictador chino, Xi Jinping, estuvo en Riad en diciembre para asistir a reuniones con naciones árabes del Golfo, las cuales resultaron cruciales para el suministro de energía de China. Cabe recordar que China es uno de los principales compradores de petróleo saudí.

Un alto funcionario de seguridad iraní dijo que el acuerdo del viernes había sido respaldado por el líder supremo, el ayatolá Ali Jamenei. “Es por eso que Shamkhani viajó a China como representante del líder supremo“, dijo el funcionario a Reuters. “El establishment quería demostrar que la máxima autoridad en Irán respaldó esta decisión“.

Por su parte, el Príncipe Heredero y Primer Ministro saudí, Mohammad bin Salman, le bajó el tono al enfrentamiento entre ambos países el año pasado al afirmar que, para Arabia Saudita, era favorable a convivir en paz.

El ministro de Relaciones Exteriores iraní, Hossein Amirabdollahian, aseguró que la normalización de las relaciones ofrece grandes perspectivas para ambos países y para Oriente Medio, insinuando nuevos pasos.

La política de vecindad, como eje clave de la política exterior del gobierno iraní, se está moviendo fuertemente en la dirección correcta y el aparato diplomático está activamente detrás de la preparación de más pasos regionales“, tuiteó Amirabdollahian.

Ministro de Relaciones Exteriores iraní, Hossein Amirabdollahian

Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores de Arabia Saudita, el príncipe Faisal bin Farhan Al Saud, dijo en enero que se estaban haciendo progresos para poner fin al conflicto de Yemen.

En respuesta al anuncio del viernes, el ministro de Relaciones Exteriores de Omán, Badr Albusaidi, dijo en Twitter que la reanudación de las relaciones diplomáticas entre Arabia Saudita e Irán era un “ganar-ganar para todos y beneficiará la seguridad regional y global”.

Omán e Irak organizaron conversaciones entre Irán y Arabia Saudita en 2021 y 2022.  En la declaración trilateral desarrollada después de las conversaciones entre Irán, Arabia Saudita y China, “las partes saudita e iraní expresaron su aprecio y gratitud a la República de Irak y al Sultanato de Omán por organizar rondas de diálogo que tuvieron lugar entre ambas partes durante los años 2021-2022“.

Las dos partes también expresaron su aprecio y gratitud al liderazgo y al gobierno de la República Popular China por acoger y patrocinar las conversaciones, y los esfuerzos que realizó para su éxito“, agregó el comunicado.

Ministro de Relaciones Exteriores de Arabia Saudita

La Guerra “Fría” entre Irán y Arabia Saudita

Queda por ver qué impacto tendrá este acuerdo en la Guerra en Yemen, los enfrentamientos en Irak y Siria, las elecciones en el Líbano, el acuerdo nuclear con Estados Unidos y la situación entre Palestina e Israel, todos puntos de conflicto entre Arabia Saudita e Irán que los habían visto en veredas opuestas durante las últimas dos décadas.

Un alto funcionario iraní dijo que abordar las tensiones con Arabia Saudita se había convertido en una prioridad para Teherán en los últimos meses y ayudaría a resolver las conversaciones de larga data sobre el programa nuclear de Irán. “Alentará a Occidente a llegar a un acuerdo nuclear con Irán“, dijo el funcionario a Reuters.

La guerra fría existe hace casi dos décadas, pero Arabia Saudita rompió lazos con Teherán de manera definitiva en 2016 después de que un grupo de manifestantes iraníes invadieron y atacaran la embajada saudí en Teherán y el consulado saudí en Mashhad. Esto ocurrió luego de que Arabia Saudita ejecutara al clérigo Nimr al-Nimr, un prominente erudito musulmán chiíta, por “desobediencia civil” luego de que este propusiera la sedición y rebelión contra el gobierno de Riad.

Además, Irán, de mayoría chiíta, y Arabia Saudita, de mayoría sunita, apoyan a bandos rivales en varias zonas de conflicto en todo Medio Oriente, entre ellos Yemen y Siria.

La Embajada de Arabia Saudita en Irán en llamas durante una manifestación en Teherán, el 2 de enero de 2016

En los últimos años, se lanzaron acusaciones cruzadas entre ambos países de atacar infraestructura crítica dentro de sus respectivos territorios. Arabia Saudita ha culpado a Irán por los ataques con misiles y vehículos aéreos no tripulados contra las instalaciones petroleras del reino en 2019, así como por los ataques contra petroleros en aguas del Golfo.

El movimiento Houthi, aliado de Irán y que controla la capital de Yemen desde septiembre de 2014, también ha llevado a cabo ataques transfronterizos con misiles y drones contra Arabia Saudita, que lidera una coalición árabe que lucha contra los hutíes.

Adnan Tabatabai, CEO del Centro de Investigación Aplicada en Asociación con Oriente, un grupo de expertos con sede en Alemania, dijo a Al Jazeera que China tiene un gran interés en no ver la situación de seguridad regional “caer en el caos”, como ocurrió en 2019, “cuando las vías fluviales del Estrecho de Ormuz fueron los sitios de diferentes explosiones y ataques“, lo cual generó una importante caída en el comercio chino.

Hay intereses inherentes para que los chinos intenten usar la influencia que tienen hacia Teherán y Riad para hacer algunos esfuerzos para equilibrar estas relaciones y finalizar lo que los iraquíes y los omaníes habían comenzado“, dijo Tabatabai.

Argentina: El Riesgo País se dispara por encima de los 2.200 puntos

De Derecha Diario

El índice Merval se desplomó hasta un 5% en la jornada del día viernes, y los bonos en dólares sufrieron importantes caídas. El shock internacional llega al país en medio del colapso del programa de Sergio Massa y el fuerte estallido inflacionario. 

Como si los problemas internos no fueran suficientes, el shock financiero internacional provocado por la caída del Silicon Valley Bank amenazan con bautizar otro capítulo más en la inestabilidad argentina. 

Al riesgo por un incumplimiento local se le suma el propio riesgo que sufre el mercado financiero mundial. Por estas razones, el índice de Riesgo País que elabora JP Morgan se disparó hasta los 2.207 puntos básicos al cierre del 10 de marzo, obteniendo así un aumento del 3,1% en un día. Se trata del valor más importante desde diciembre del año pasado.

El índice bursátil S&P Merval sufrió una fuerte caída que llegó hasta el 2,87% en su peor momento del día viernes, y finalmente cerró la jornada al estabilizarse en los 240.621,910 puntos. Se sintió el mismo efecto que prácticamente sufrieron el grueso de las plazas bursátiles a nivel global. Las acciones bancarias fueron las más directamente afectadas por el shock internacional, y sufrieron caídas de hasta el 5,18%

Como era de esperar, las acciones argentinas cotizando en la plaza de Wall Street también sufren una reversión importante. Los ADRs mostraron números rojos prácticamente sin ninguna excepción: Pampa Energía se desplomó un 5,35%, YPF cayó un 4,15% después de anotar buenos rendimientos en los últimos días, Edenor se desplomó un 3,14% y Transportadora del Gas del Sur cayó casi un 1%. 

Los ADRs financieros también sufrieron importantes correcciones. El Grupo Financiero Galicia cayó un 2,7%, el Banco Macro un 2,3%, el BBVA hasta un 1,42%, el Grupo Supervielle retrocedió un 0,47%, y Mercado Libre cayó un 1,28%.

El shock no podría haber llegado en un peor momento. El Banco Central se encuentra en medio de una profunda sangría de reservas, en parte para hacer frente al pago de importaciones, para atender la creciente demanda de los mercados y para postergar una devaluación más acelerada sobre el cambio oficial. 

Al mismo tiempo, la histórica sequía sobre el campo limita la entrada de divisas al país, así como también la recaudación tributaria vía retenciones correspondiente a los primeros meses del año.

El programa de Sergio Massa comenzó a dar indicios de agotamiento tan pronto como a principios del año, cuando quedó en evidencia que la meta inflacionaria para diciembre no podrá cumplirse de ninguna manera. La inflación alcanzó el 6% mensual en enero, volvería a registrar una variación similar en febrero, y las proyecciones para marzo superan el 7%. 

El shock internacional solamente profundiza una tendencia negativa que ya se venía observando desde el segundo semestre del año pasado. La actividad económica se resintió, la inflación mensual no logró perforar el piso del 5% y la prima de Riesgo País ya se encontraba en alza desde la primera semana de febrero. 

Meloni recibe a Netanyahu y promete una “nueva era” de relaciones entre Italia e Israel

De Derecha Diario

El primer ministro israelí viajó a Roma para reunirse con su homóloga y asistir a una reunión de negocios con los más influyentes empresarios italianos para firmar nuevos acuerdos de inversión y colaboración.

Este viernes, el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, fue recibido por su homóloga italiana Giorgia Meloni en Roma en lo que significó la primera visita de alto perfil del renovado mandatario judío a Europa.

Los dos se conocen de larga data y se tienen “en alta estima desde hace mucho tiempo”, según dijeron ante la prensa después de un almuerzo de trabajo. Netanyahu felicitó a la ex diputado en su nuevo rol al frente del difícil gobierno italiano, y mencionó que estaba “muy impresionado” por su liderazgo.

Meloni es hoy la máxima líder de la derecha no solo en Italia si no que en toda Europa, mientras que Netanyahu cumple el mismo rol en Israel, la única democracia de Medio Oriente, lo que los convierte en dos fuerzas importantísimas para desarrollar una integración internacional entre sus países.

En junio de 2022, los entonces primeros ministros Naftali Bennett y Mario Draghi habían prometido fortalecer las relaciones entre Israel e Italia. Sin embargo, sus gobiernos colapsaron y ambos países volvieron a las urnas, de las cuales Netanyahu y Meloni salieron victoriosos.

La cumbre de la derecha prometió continuar con aquella promesa fallida de sus predecesores, y se llegaron a múltiples acuerdos relacionados con las relaciones comerciales, inversiones bilaterales, defensa, energía y transporte.

El primer ministro israelí participó en la primera edición del Foro Económico para Empresas Italianas que lanzó Adolfo Urso, actual Ministro de Comercio italiano. El objetivo de la inclusión de Netanyahu en el evento fue para discutir posibles inversiones cruzadas con Israel en los sectores industriales, tecnológicos y científicos.

Netanyahu le dijo a los grandes empresarios italianos que ambos países necesitan un “salto cuántico” en la cooperación bilateral y hacia el fin del Foro se acordaron reuniones intergubernamentales todos los años para mantener esta asociación estratégica.

El destino de Europa se juega en el Mediterráneo, y nuestros países juntos pueden mostrar el camino a seguir”, subrayó el ministro Urso, “también porque cuentan con sistemas económicos y productivos complementarios, especialmente propicios para afrontar las nuevas fronteras tecnológicas”.

Asistieron a la conferencia del primer ministro judío más de cincuenta representantes de empresas y organizaciones italianas con intereses en Israel. Las charlas abarcaron seguridad, energía, digitalización, salud, agua, agricultura e innovación. Estuvieron presentes, entre otros: EniEnelEdison Snam (energía); LeonardoFincantieriIveco Thales Alenia (defensa y espacio); CDPSimestFSItaPizzarottiGranaroloIrenAceaPoste Confagricoltura (agricultura y otros sectores).

Netanyahu y Meloni

Tras un almuerzo privado entre los dos mandatarios, los premiers dieron una conferencia de prensa donde contaron de proyectos relacionados con el comercio de gas que quieren llevar adelante.

Ya cooperamos en gas y queremos expandir el sector: estamos considerando agregar una instalación de GNL para llevarlo a Europa”, dijo Netanyahu. Es importante aclarar que entre ambos países están involucrados en la construcción del EastMed-Poisedon, un proyecto de gasoducto de casi 2.000 kilómetros de largo destinado a transportar energía desde el este del Mediterráneo a Europa a través del sur de Italia.

El gasoducto terminaría con la dependencia de Italia del gas ruso, y permitiría interconectar Italia con Grecia, Creta, Chipre y finalmente, Israel.

Los mandatarios también hablaron de cooperación internacional para terminar con el antisemitismo en las comunidades islámicas. Meloni recordó que apoya los Acuerdos de Abraham firmados originalmente entre los países árabes, Israel y los Estados Unidos durante el gobierno de Trump.

A pesar de que el gobierno italiano dio su “total apoyo” a la normalización de relaciones entre Israel y el mundo árabe, un proceso que espera la entrada de Arabia Saudita en los Acuerdos de Abraham, Meloni no hizo mención de si trasladará la embajada italiana de Tel Aviv a Jerusalén, reconociendo la verdadera capital del Estado judío, como había prometido su coalición durante la campaña.

Quien más presiona por esto es Matteo Salvini, líder del partido derechista Lega y viceprimer ministro de Meloni, quien asegura que Italia, como una nación fundadora de los valores judeocristianos, tiene el deber moral de reconocer que Jerusalén no pertenece al Islam.