El Gobierno de Argentina ha presentado este jueves una denuncia ante el Tribunal Penal Internacional (TPI) por la «detención arbitraria» y «desaparición forzada» de uno de sus ciudadanos, el suboficial de Gendarmería Nahuel Gallo, procesado en Venezuela —sin pruebas— por supuestos «vínculos con el terrorismo».
Para el Ministerio de Asuntos Exteriores de Argentina la detención de Gallo el pasado 8 de diciembre de 2024 «constituye una violación grave y flagrante de los Derechos Humanos», que evidencia además «un patrón sistemático de crímenes de lesa humanidad» cometidos por las autoridades venezolanas.
La denuncia señala particularmente al fiscal general de la narcotiranía que somete a Venezuela, Tarek William Saab, quien hace una semana anunció que Gallo entró ilegalmente en Venezuela para colaborar con grupos opositores en «acciones desestabilizadoras y terroristas».
El Gobierno argentino ha recalcado que «continuará utilizando todos los recursos legales y diplomáticos para garantizar los derechos del ciudadano Nahuel Gallo, proteger los Derechos Humanos y exigir justicia internacional».








