Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) informaron este sábado que en una operación de combate de una de sus divisiones en el sur del Líbano se «localizaron y destruyeron cuatro infraestructuras subterráneas de Hezbolá».
En la maniobra militar, donde colaboraron unidades de ingeniería, fueron utilizadas «más de 100 toneladas de explosivos».
Las FDI afirman que los objetivos se encontraban ubicados sobre mezquitas, escuelas y otros «edificios civiles». Uno de ellos correspondía a un cuartel general de la fuerza Radwan de Hezbolá, encargada de las operaciones especiales llevadas a cabo por el grupo militarizado. Este espacio contaba con un almacén de armas y municiones, «medios para permanecer mucho tiempo», entre otros.
«En la zona cercana a la infraestructura subterránea se localizaron decenas de armas, entre ellas: minas, misiles antitanques, cañones antiaéreos, granadas, lanzagranadas, ametralladoras, fusiles Kaláshnikov, municiones y medios de comunicación para orientación y observación», indicaron las FDI.
En esta misma jornada, aviones de combate israelíes lanzaron varios ataques masivos contra el suburbio sur de la capital libanesa, Beirut. Se informó que dos ataques sucesivos se llevaron a cabo en un edificio, que fue completamente destruido.
Asimismo, el Ejército israelí instó a los residentes a evacuar varios edificios más que, según se afirma, se encuentran cerca de las instalaciones de Hezbolá.