Turquía ha afirmado que los atentados «son consecuencia directa e indirecta del apoyo de algunos países a grupos terroristas», en el marco de las críticas de Ankara contra Turquía por su apoyo a las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) y el presunto respaldo de Suecia y Finlandia al Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK).
«La comunidad internacional debe prestar atención. Los ataques terroristas contra nuestros civiles son consecuencia directa e indirecta del apoyo de algunos países a grupos terroristas», ha señalado Fahrettin Altun, portavoz de la Presidencia turca.
«Deben detener inmediatamente su apoyo directo a indirecto (a grupos terroristas) si quieren la amistad de Turquía», ha valorado en una serie de mensajes en su cuenta en la red social Twitter, un día después de la muerte de seis personas en un atentado con bomba en Estambul.
Así, ha subrayado que «el terrorismo ha mostrado de nuevo su fea cara en la querida ciudad de Estambul», antes de agregar que las autoridades turcas «encontrarán a los responsables y les harán pagar un alto precio».









