Los Estados miembros de la Unión Europea avanzan en la aprobación del marco de negociación para la adhesión de Ucrania con las reticencias de Hungría, que amenaza con ser el principal obstáculo a la luz verde al marco legal para lanzar el proceso de integración de Kiev en el bloque europeo.
Con la idea de poder acordar la apertura de negociaciones en la cumbre de líderes de junio y dar el pistoletazo de salida a las conversaciones los días siguientes en una conferencia intergubernamental, los 27 han mantenido un primer debate a nivel de embajadores que ha servido para aclarar dudas y recabar el apoyo mayoritario a avanzar en la cuestión y finalizar pronto el marco de negociación para Ucrania y Moldavia.
El objetivo es celebrar la primera reunión con ambos candidatos a finales de junio, una meta que solo parece amenazar la posición de Hungría, que ha roto el consenso este miércoles siguiendo la línea marcada en otras áreas de apoyo europeo a Ucrania, como el reembolso de la ayuda militar a los 27 o el fondo para garantizar la asistencia financiera a largo plazo a Kiev.
Cabe recordar que Hungría pide cambios «significativos» al texto sobre Ucrania en lo que respecta a los derechos de las minorías nacionales, comercio, lucha contra la corrupción, agricultura, mercado interior o relaciones de vecindad, para bloquear políticas de respaldo a Kiev en el seno de la UE.
Además, destaca el hecho de que Hungría parece ser el único socio que pide cambios y busca añadir algunos elementos en el texto antes de dar el visto bueno definitivo, por lo que, de enquistarse, puede acabar bloqueando la cuestión de cara a la cumbre de dentro de un mes en Bruselas ya que la política de Ampliación funciona por unanimidad de los 27.