El Ministerio de Defensa de Suecia ha informado este martes de que la Fuerza Aérea ha interceptado dos bombarderos estratégicos rusos Tu-22M y otra pareja de aviones de combate Su-27 que los escoltaban mientras sobrevolaban el mar Báltico.
Ante estos hechos, las autoridades militares suecas han hecho despegar dos de sus cazas JAS Gripen para escoltar a los aviones rusos de vuelta al espacio aéreo de su país. El jefe del Estado Mayor sueco, Denis Hedstrom, ha reconocido que estos suceso son habituales.
Por su parte, las autoridades de Finlandia han puesto en el aire un F-18 que, poco después, ha sido reemplazado por un F-35 neerlandés de la OTAN. La cooperación bilateral «garantizó una interacción fluida entre los aviones de combate aliados», ha dicho el Ministerio de Defensa sueco en un comunicado.
Mientras tanto, el Ministerio de Defensa de Rusia ha informado en sus redes sociales de que los dos bombarderos, acompañados de los aviones de combate, han llevado a cabo un vuelo programado sobre aguas neutrales del Báltico durante más de cinco horas.
«En determinadas etapas del recorrido, los bombarderos de largo alcance iban acompañados de cazas extranjeros», ha informado la cartera de Defensa rusa en su canal oficial de Telegram, donde ha recalcado que esta maniobra se ha realizado «en estricta conformidad con las normas internacionales para el uso del espacio aéreo».