EE. UU. podría retirarse de las negociaciones para la solución del conflicto ucraniano si Rusia y Ucrania no aceptan una «propuesta muy explícita» de Washington. Así lo anunció el miércoles el vicepresidente de EE. UU., James David Vance, durante su visita a la India.
«Hemos emitido una propuesta muy explícita tanto para los rusos como para los ucranianos, y es hora de que digan que sí o de que EE. UU. abandone este proceso», declaró Vance a los periodistas. A continuación, señaló que «tanto ucranianos como rusos tendrán que ceder parte del territorio que poseen actualmente».
«Las fronteras actuales, en algún punto cercano a ellas, es donde, en última instancia, creo que se trazarán las nuevas líneas en el conflicto», subrayó. Además, recalcó que EE. UU. ha realizado «un trabajo diplomático de campo extraordinario».
«Nos hemos esforzado por comprender la situación desde la perspectiva tanto de los ucranianos como de los rusos», dijo.
«Creo que hemos elaborado una propuesta muy justa. Veremos si los europeos, los rusos y los ucranianos logran finalmente que esto se concrete. Me siento bastante optimista al respecto. Creo que todos han estado negociando de buena fe», continuó el funcionario.
«Ahora es el momento de dar, si no el último paso, uno de los últimos, que consiste en que las partes, a un nivel amplio, digan: ‘Vamos a dejar de matar, vamos a congelar las fronteras territoriales en un nivel cercano a donde están hoy y vamos a establecer un acuerdo diplomático a largo plazo que, con suerte, conduzca a una paz duradera'», resumió Vance.
Por su parte, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, aseguró que Washington «continúa con sus esfuerzos de mediación». «Sin duda, acogemos con satisfacción estos esfuerzos de mediación. También continuamos nuestros contactos. Por supuesto, hay muchos matices en torno a este acuerdo que es necesario discutir. El trabajo continúa», agregó.