Caracas. – Debido a las amenazas y presiones del narcorégimen, los concejales de la Cámara Municipal de Maracaibo (Zulia) decidieron suspender su sesión, y la directora encargada de la Alcaldía marabina, Vanessa Linares, también optó por renunciar a su cargo para que la tiranía cese en sus persecuciones contra ese municipio.
Así, la sesión que habían pautado los concejales maracuchos para este martes fue pospuesta, tal como lo informaron en un comunicado que enviaron por redes sociales.
Los ediles y trabajadores del ente local sustentan la decisión por razones de seguridad. Alegan que están siendo perseguidos por órganos del narco-Estado. Explicaron haber tomado la medida para «preservar el funcionamiento de ese órgano legislativo municipal», a la vez que exigieron «(…) a los órganos del Estado a cesar la persecución contra los poderes legítimamente constituidos, entendiendo el daño que esto genera a la estabilidad nacional y a la paz que toda nuestra nación pide a diario».
Cabe señalar que la sesión de este martes estaba destinada a elegir un alcalde, que sustituyera al burgomaestre Rafael Ramírez, secuestrado hace días también por el narcorégimen.
El acoso de la tiranía provocó también la renuncia de Linares, esposa de Ramírez, quien había asumido como directora encargada de ese despacho, en vista del vacío a causa del rapto de su conyugue.
En un video que publicó la dama, explicó que decidió no ejercer el cargo, precisamente para que se suspenda el acoso hacia la Cámara, y le permitan sesionar a fin de elegir un alcalde que reemplace a Ramírez.
«Esta decisión responde a la urgencia de que se le permita sesionar sin persecución e intimidaciones a la Cámara Municipal de Maracaibo, en función de sus atribuciones legales para nombrar a un alcalde encargado, y que el trabajo y los avances que en beneficio de los marabinos se ha impulsado los últimos tres años no se detenga», dijo Linares en la grabación.
Igualmente, indicó que se dedicará a luchar por la liberación de su esposo, quien «fue injustamente privado de libertad junto a su equipo, a quienes sus hijos están esperando en casa.