Esta semana, la noticia del día trata un informe publicado por el periódico español El País que sugiere que el líder del narcorégimen, Nicolás Maduro, duda de la voluntad del presidente Donald Trump de llevar a cabo una acción militar directa contra Venezuela.
Según el reporte, Maduro cree que el operativo naval en aguas internacionales será retirado y que, por lo tanto, no tiene intenciones de negociar con la administración estadounidense.
En línea con esta postura, Maduro ha abandonado su previa fase de súplicas y cartas a la Casa Blanca para adoptar un discurso abiertamente desafiante, refiriéndose a sus seguidores como el «pueblo de los comecandelas».
En la sección «En polemica», se habla del Nobel de la Paz que otorgaron a María Corina Machado, un reconocimiento que se considera bien merecido dada su trayectoria en la búsqueda de vías pacíficas. Sin embargo, la polémica surgió a raíz de su declaración sobre la posibilidad de recibir el premio, pues Machado afirmó que solo podrá viajar a recibir el Premio Nobel de la Paz si Maduro «abandona el poder.»
En este marco, se recuerda que «Maduro no va a dejar el poder, a Maduro hay que sacarlo del poder.», por lo cual se argumenta que la declaración es «superflua» y que el premio, si bien es un logro que visibiliza la lucha, viene cargado con la responsabilidad de ser más contundente y realista.
Así, se cuestionó la estrategia de condicionar la recepción del premio a un acto de «buena voluntad» de un líder al que EE. UU. cataloga como narcoterrorista.
Por último, en la sección: «El corrupto en la mira», se habla del general en jefe Néstor Reverol Torres, exministro y excomandante de la Guardia Nacional Bolivariana, quien es un alto cargo del Cártel de los Soles, con juicios abiertos por narcotráfico en Miami y Nueva York.
Los analistas destacaron la paradoja de que Reverol fue un oficial que se formó en la lucha antidroga en múltiples países (incluidos EE. UU. y Alemania) y que fue el oficial que más droga incautó en la historia de la Guardia Nacional. Se concluyó que utilizó todo su conocimiento y formación especializada para convertirse en uno de los principales capos de la droga del país, con el respaldo del Estado. Si bien, a pesar de su historial y órdenes de captura, se señaló la inexplicable falta de una recompensa por su detención.








