El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha emitido este jueves una orden ejecutiva que permitirá a las distintas agencias federales ampliar las sanciones a aquellos individuos que obstruyan la transición hacia la democracia en Sudán en el marco de los enfrentamientos entre el Ejército y las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF).
«La situación en Sudán, incluida la toma del poder por parte de los militares en octubre de 2021 y el estallido de enfrentamientos entre las partes en abril de 2023, constituye una amenaza inusual y extraordinaria para la seguridad nacional y la política exterior de Estados Unidos», ha indicado la Casa Blanca en un comunicado.
En este sentido, ha recalcado que Washington apoya una transición a la democracia y un gobierno civil de transición en Sudán, por lo que las sanciones se extenderán, en virtud de la orden ejecutiva, a todos aquellos que obstruyan dicho proceso limitando la libertad de expresión, promoviendo la corrupción o cometiendo abusos a los Derechos Humanos, entre otros.
«La violencia que tiene lugar en Sudán es una tragedia, y es una traición a la demanda del pueblo sudanés de un gobierno civil y una transición a la democracia. Me uno a las demandas de paz en Sudán y a los líderes de todo el mundo para pedir un alto el fuego duradero entre las partes beligerantes», ha expresado Biden.