Israel ha anunciado una ofensiva contra objetivos de la Asociación Al Qadr al Hasán, considerada el ala financiera del partido-milicia chií libanés, que incluye bombardeos en la región de la Becá, concretamente en Baalbek y Hermel, y también en la capital libanesa, Beirut.
El portavoz del Ejército israelí, Daniel Hagari, ha explicado que atacarán las instalaciones y sucursales de la organización bancaria en todo el país, por lo que insta a la población a distanciarse de inmediato de las mismas.
«En unos minutos vamos a emitir órdenes de evacuación a los vecinos de Líbano en Beirut y otras zonas para que evacuen los lugares utilizados para financiar la actividad terrorista de Hezbolá», ha apuntado.
En este sentido, añade: «Subrayo que quien estén cerca de estos lugares utilizados para financiar la actividad terrorista de Hezbolá debe alejarse de inmediato».
Esta ofensiva incluye «muchos lugares» que serán atacados «en las próximas horas» y «más objetivos durante la noche».
«En los próximos días vamos a revelar cómo Irán financia la actividad terrorista de Hezbolá utilizando instituciones civiles y asociaciones como cobertura», ha adelantado.
Hagari ha argumentado que Hezbolá utiliza esta institución como un banco para pagar salarios a sus miembros y dar apoyo a civiles. Unas 300.000 personas, la mayoría civiles, hacen uso de sus servicios.
Poco después del anuncio israelí, medios libaneses han informado de explosiones en los barrios del sur de Beirut, como Chueifat el Amrusiyé, y en la región de la Becá.
En total, se han emitido órdenes israelíes de evacuación para al menos 15 edificios en las que se insta a la población a mantenerse a unos 500 metros.
Cabe recordar que la Asociación Al Qadr al Hasán es una organización sin ánimo de lucro fundada en 1983, según la televisión Al Manar, afín a Hezbolá, y ofrece préstamos sin intereses siguiendo los preceptos financieros islámicos con el formato de microcréditos.
Tras los ataques, la organización ha subrayado que ha tomado medidas para «proteger los depósitos» de sus clientes.
«Es importante señalar que la fundación ha tomado todas las medidas necesarias desde el inicio de la guerra. Estas medidas son suficientes para salvaguardar los depósitos y la confianza de los ciudadanos, sus bienes y los frutos de su trabajo. Ojo por ojo, diente por diente», ha advertido la entidad en un comunicado.